En entrevista, Ricardo Raphael De la Madrid, destacó que este libro tiene un título llamativo para hablar de un tema conocido por los mexicanos, un libro sobre la desigualdad, una desigualdad que dijo se provoca por la estructura que tiene nuestro país de privilegios, que hace que algunos puedan tener riqueza, derechos, beneficios, mientras muchos otros mexicanos y mexicanas quedan al margen de los mismos.
Esa estructura de oportunidades tan mexicana, la llamó en este libro Mirreynato: “porque creo que entre los más beneficiados por esta estructura están estos personajes, hoy conocidos sobre todo por los más jóvenes como los Mirreyes, si habría que poner un nombre a ese régimen moral, pongámosle el de las personas que se han beneficiado más, y por eso le llame Mirreynato”.
La obra tiene anécdotas e historia, y recupera mucho lo que hemos visto de las “ladys de Polanco”, y casos como el del nieto del procurador que golpeó a su novia y salió bien librado: “una vez que uno empieza a observar esas historias nos damos cuenta que son consistentes de una forma de relacionarnos entre los mexicanos y a partir de allí, el libro explora no tanto a los mirreyes sino al mirreynato”.
Abundo que este tipo de estereotipos representan aspiraciones en la sociedad: que son lamentables, porque muchos jóvenes que tienen ganas de salir adelante y de ser respetados, empiezan a ver a los mirreyes como una opción de hablar, de comportarse, de relacionarse, de discriminar, hasta de vejar y lastimar, y a partir de esa lógica creen que si se comportan como ellos van a tener los beneficios que el mirrey tiene.
Detalló que de pronto se vuelven un rol a seguir que es francamente triste, y que está operando en la sociedad, las jóvenes quieren ser como la artista de la telenovela que se consigue un novio gobernador, o los jóvenes quieren tener guaruras porque eso da prestigio, aspiran a poseer una gran casa, esos son los roles que hoy están en juego y que acaban lastimando lo que se conoce como uno de los valores más preciados de la democracia en México, que es la cultura del esfuerzo.
Indicó que este tipo de roles a seguir también se dan en el entorno de la delincuencia, y detalló: “cuando la gente se da cuenta que estudiando mucho o trabajando de manera honrada no tendrá la cantidad de recursos que se requeriría para ser un mirrey, comienza a antojarse la idea de ir por lo fácil, y de pronto el crimen, la ilegalidad y la corrupción acaban siendo vías muy rápidas para la obtención de recursos.
Por eso también vamos a ver muchos mirreyes que son hijos de criminales. Otra vía es irse a los Estados Unidos, para subir muy rápido y al llegar a México se ponen a ostentar e imitar a la clase de mirrey, así que por cualquiera de las vías paralelas encontraremos individuos que tratan de cumplir con este rol que la sociedad les están imponiendo”.
Finalmente, Ricardo Raphael De la Madrid destacó que este es un libro conclusión a un trabajo de casi diez años de temas relacionados con discriminación: “y ahora tengo otras ideas en la cabeza relacionadas a cómo se han modificado estos roles a los que hicimos referencia, los roles en los noventa eran unos y ahora en el siglo XXI; y creo que más que los roles de los mirreyes, quisiera observar los roles de los que viven con mayor precariedad”.