Incluso sin ser un gran conocedor de Dylan esto de tener que escoger sólo 10 canciones del maestro de Minnesota me resulta difícil y doloroso; incluso si fueran 30 posiblemente aun me quedaría con las ganas de añadir alguna más… Prefiero no pensar cómo debe de ser en el caso de los verdaderos conocedores y apasionados de Dylan, como Joserra, a cuyo homenaje a las 70 primaveras de His Bobness me quiero unir humildemente con esta serie de entradas de dicadas a mis temas favoritos del genio de Duluth.
A mí me gusta el “Knockin’ On Heaven’s Door” de "Pat Garrett & Billy The Kid", con la guitarra de Roger McGuinn, por encima de cualquier otra versión o interpretación que haya escuchado, del propio Dylan o de cualquier otro. Quizá se deba a que siempre se me hace demasiado corta y me quedo con las ganas de que esos coros y esas guitarras finales duren mucho más tiempo.
Es la canción crepuscular por excelencia y a mí siempre me han gustado las historias crepusculares. Nadie mejor que Dylan para que te cuente y te cante una. Cuando escucho “Knockin’ On Heaven’s Door” el tiempo se detiene, y me invade una extraña sensación de trascendencia que me abandona tan súbitamente como esos coros y esas guitarras… El sol se acaba de poner, y siempre lo hace demasiado rápido, dejándonos con las ganas de prolongar esos preciosos instantes. Pero ahí reside la magia de las puestas de sol, te dejan llamando a las puertas del cielo…"Knockin' On Heaven's Door"- Bob Dylan (Pat Garrett & Billy The Kid, 1973)