Cuando somos niños solemos ser tremendamente curiosos y por lo general, adoramos a todos los "bichos". Tuve la suerte de nacer en un pueblo y que a mi padre le gustara salir al campo, por lo que desde bien pequeño comencé a visitarlo muy a menudo.
Soy de esos que se han mojado bajo la lluvia, se han ensuciado con la tierra, le han "picado los bichos"... He jugado libremente por el campo. He trepado a los árboles, construido chozas, cazado lagartijas e insectos, tirado piedras a los charcos o al rió.
Recorrí caminos, con mi primo Juan Carlos (DEP), acompañando al "Jaro" un pastor que sabía todo sobre los animales y sus ciclos vitales. Me montaba es su borrica, vi parir a las ovejas y aprendí a usar la honda... lo que antes era ser un niño de pueblo.
La naturaleza nos ofrece una gran cantidad de estímulos de niños y de adultos. El contacto con ella hace que te encuentres en un espacio abierto, con sensación de libertad, con la capacidad de observar los procesos que ocurren y de conocer mejor a sus habitantes.
Pues desde pequeño hasta ahora siempre he tenido los mismos animales preferidos que son los siguientes:
- AVES:
El águila real, siempre la he considerado la reina de los cielos.
El búho real es la segunda de mis aves preferidas.
- MAMÍFEROS:
El lobo ibérico es mi segundo mamífero preferido.