Hoy se cumple el primer aniversario de uno de los hombres más nobles, valientes y generosos que he podido "conocer". Por eso, hoy he querido recordar su figura en este blog, a través de un artículo con el que me topé, hace unos días, por las páginas virtuales del diario "El Mundo".
Este hombre se merecerá que se le recuerde, siempre, por su esfuerzo, su entrega, su legado y su figura.
Ojalá nos pareciéramos todos a él, al menos un poquito.
Que no descanses en paz, Vicente, tal y como decías y deseabas cuando aún estabas por aquí abajo. Que ahí donde te encuentres continúes con tu labor y puedas ayudarnos y guiarnos a los que proseguimos sobre esta bola azul.
Gracias por existir. Te queremos y recordaremos siempre.
Un año sin el 'father' Ferrer
Vicente Ferrer. | Carlos Barajas
- Su fundación es candidata al Premio Nobel de la Paz
Mª Jesús Hernández | Madrid
www.elmundo.es
Nunca esperó fama; ni mucho menos, poder. Sólo un milagro, un milagro que llegó con él. Se cumple un año de la muerte de Vicente Ferrer, el hombre que llevó la esperanza y enseñó el camino de la dignidad a una de las regiones más pobres de la India, Anantapur. El 'father' Ferrer se fue, pero su 'revolución silenciosa' sigue adelante.
Se rebeló contra la Historia y las costumbres de un país y se puso al servicio de los grupos tribales, de las 'backward castes' y de los 'dálits' (los intocables), los pobres de los pobres en el sistema de castas indio. Anna Ferrer, su compañera durante más de 40 años, no olvida sus palabras: "Estamos aquí para intentar que el sufrimiento, la pobreza y la injusticia desaparezcan. Éste es el sentido de nuestras vidas. No podemos parar, hay que llegar a más y más pueblos", recuerda mientras puntualiza que desde que el cooperante catalán falleció han conseguido llegar a 300 localidades más.
Hoy más de dos millones y medio de personas viven, que no sobreviven, gracias al proyecto de Rural Development Trust (creado en 1969) y a la Fundación Vicente Ferrer (1996). Se enfrentó al problema desde la raíz y enseñó a cultivar tierras, a construir casas, a sacar agua de donde no la había... Y todo ello bajo la misma premisa "no me preguntes qué voy a hacer para ayudarte, pregunta qué vas a hacer tú para ayudar al que tienes al lado". Así explicaba la base de su proyecto Vicente Ferrer a Rafael Vilasanjuan, presidente de la plataforma ciudadana Nobel FVF que ha presentado a la Fundación como candidata al Nobel de la Paz.
Corría el año 1952 cuando el 'father' pisaba por primera vez la India, Bombay más concretamente. Llegó como misionero jesuita pero sólo necesitó una pequeña toma de contacto para dejar a un lado las oraciones y pasar a la acción. La labor del Santo de Mammadh, como le llamaban entonces, levantó ciertas suspicacias entre las altas esferas del lugar y acabó siendo expulsado en contra del clamor popular. No obstante, fue la mismísima Indira Gandhi quien calificó este periodo de 'cortas vacaciones'. Consiguió regresar al país que ya consideraba su casa y fue acogido en el estado Andhra Pradesh, más concretamente en la región de Anantapur. Fue allí donde consolidó su proyecto, una fórmula mágica que ahora opta al Nobel.
Carrera hacia el Nobel de la Paz
"Vicente era un visionario y sabía que no era suficiente con las inyecciones de dinero, hacía falta más. Era consciente de que el modelo clásico no funcionaba y que había que buscar otras soluciones en las que la gente fuera la clave de la revolución. Soluciones en base a la sociedad", explica Vilasanjuan.
No sabe si lo conseguirán: "El Nobel es un objetivo, pero también un camino, una carta de presentación para dar a conocer el proyecto". Es más, el presidente de la plataforma no descarta la posibilidad de que se convierta en una carrera de fondo de más de un año. "Méritos para conseguir el galardón le sobran. Es un proyecto excepcional, un proyecto para replicar, pero el Nobel es muy caprichoso" comenta.
Consciente de que su talón de Aquiles es el desconocimiento de esta organización fuera de nuestras fronteras, siempre tuvo claro su objetivo: la difusión internacional. En estos momentos preparan una Conferencia Internacional en Oslo, que tendrá lugar el lunes 21 de junio, y una posterior en Bruselas. Ana Palacio abrirá la primera y Moratinos será el encargado de la segunda. La educación de los más pequeños, la ayuda a los discapacitados, su valoración de la mujer, serán algunos de los puntos clave en estas ponencias.
Pionero en la elaboración de proyectos de desarrollo integral y Premio Príncipe de Asturias a la Concordia en 1998, "Vicente era un hombre siempre con prisa" recuerda Rafael. "Hay mucha gente que necesita ayuda ahora y no vamos a esperar', me decía". También destaca su inteligencia y aunque su espíritu sigue ahí "se echa de menos su carisma".
Homenaje
Nadie le olvida. Ni su familia, ni sus colaboradores, ni mucho menos los más de dos millones y medio de personas a los que tendió la mano y que el 19 de junio le recordarán entre cánticos y homenajes. Los niños, que gozan de educación y valores, las mujeres, los discapacitados, y todos los que han podido salir adelante y tener una vida digna, todos, acudirán a recordar al 'father' en la ceremonia que ha puesto en marcha su inseparable compañera, Anna Ferrer.
"Aquí estoy, mirando su foto, parece como si nos observara, él sigue aquí y sigue velando por nuestro trabajo. Su fuerza, su compasión, su positivismo, su sentido del humor sigue aquí. Vicente sigue motivando a todo el mundo", detalla una emocionada Anna Ferrer desde su oficina en Anantapur.
Se espera que más de 6.000 personas rindan su particular homenaje al misionero, al que durante los últimos tres meses le han construido un mausoleo donde recordarle. No obstante, todos los que trabajaron con él y los que le conocieron saben que la mejor manera de homenajearle es seguir adelante con su obra.