A la segunda ronda han pasado Jaume Collboni (en teoría mi candidato) y Carmen Andrés. No voy a entrar en lo que les une, que es mucho, ni tampoco voy a cuestionar quien es el mejor para ser candidato. Creo que los dos, después de primarias serán dignos líderes de la candidatura del PSC. Voy a buscar los factores diferenciales en algún elemento esencial de su discurso político y de su proyecto.
La semana pasada publiqué algunos factores diferenciadores que se basaban en la opinión de mis lectores, que ponían más énfasis en unos puntos fuertes u otros. El resultado creo que fue interesante y simpático. Pero una segunda vuelta es momento para mojarse.
A mi candidato le pedí una serie de retos, y creo que algunos los ha cumplido. A Carmen no se lo he hecho, no era la candidata a la que apoyé en la primera vuelta y no creo que estuviera en posición de pedirle nada.
Los elementos que creo que son diferenciales a nivel político
El eje socioeconómico. Carmen se define como la candidata “más de izquierdas” y de las bases. Es un buen alegato si lo que pretendemos es movilizar los militantes más nucleares, pero creo que sea apuntar en la dirección a la que ha de ir el PSC. Si algo ha sido el PSC de BCN es socialdemócrata, neokeynesiano y racional en el gasto. Durante los primeros años de la crisis supimos gestionarla dentro de las competencias municipales, no tirar la casa por la ventana y garantizar los derechos de ciudadanía. A menos que sea pura retórica, que no creo, “ser más de izquierdas” supondría psar a defender una postura postkeynesiana o postcapitalista. No lo comparto, no creo que ese sea el espacio del PSC, ni tan siquiera de ICV. Hay que repensar la socialdemocracia, el “new deal” y que significa no solo defender sino ampliar los derechos de ciudadanía, pero no creo que eso pase por “ser más de izquierdas” y ocupar el espacio postcapitalista, que es el mantra que se suele repetir. El centroizquierda requiere de la racionalidad económica que permite que los derechos que queremos garantizar puedan ser duraderos. Jaume Collboni está más cerca de esa postura social, económica, política y de valores que sí garantiza esos derechos a largo plazo, creo que las propuestas de Jaume son un poco más fundadas económicamente y están orientadas a poder hacerse en este contexto económico, buscando el factor multiplicador de las inversiones. Yo seguramente estoy más interesado que nadie en que los servicios sociales funcionen, vivo en el barrio más pobre de Barcelona, con el índice de desempleo y desahucios más altos. Si la ciudad falla lo hará primero en la puerta de mi casa. Por eso sé que para hacerlo funcionar necesitamos propuestas que se sostengan económicamente. Porqué o bien, no sabremos como pagarlo, o no generará el efecto multiplicador, o estaremos generando espectativas que después no cumpliremos.
Creo que el tema del #dretadecidir no se puede eludir. Jaume Collboni ha dejado claro que Catalunya es un sujeto político que ha de poder decidir, que los catalanes tenemos que votar en una consulta que relación queremos con el estado español o si queremos tener un estado propio. No compartiré con él seguramente la condición necesaria de hacerlo a través de un pacto, pero reconoce que sí o sí, se ha de hacer una consulta, él pone unas condiciones para ella que son difíciles, pero afirma que esta ha de producirse. Carmen Andrés elude el tema, evita posicionarse, no reconoce a Catalunya como sujeto político, indica que esto fractura al partido. Respeto su postura, pero no es la mía, y seguramente representa una parte del partido a la cuál me encantaría poder convencer, pero aunque estemos hablando de unas municipales es inevitable que al candidato de la principal ciudad del país se tenga que mojar, tener un proyecto, dar una respuesta. Aunque sea una que no sea tan fácil de sostener como la de Ciutadans y PP de “no a la consulta” o la de ERC de “consulta en cualquier condición”. El hecho de eludir el tema es no tener claro si Catalunya puede ser sujeto político por sí misma o no. Algo que tienen claro todas las organizaciones cívicas, sociales, culturales, vecinales, etc.. del país. En este caso prefiero un candidato que aunque no esté en mis tesis independentistas me reconozca que somos sujeto político que Carmen al eludirlo sin darse cuenta juega a favor del status quo y lo niega. Posición, que ojo, respeto, igual que respeto a todos mis compañeros que no quieren oír hablar de consulta o creen que “es una veleidad nacionalista”.
Con ello doy dos argumentos racionales que explican mi voto a Jaume Collboni y que marcan diferencias con el proyecto de Carmen Andrés. Cierto que le unen muchísimas más cosas y que Carmen está tan capacitada como cualquiera de los otros 4 candidatos para ser candidata. Simplemente, he querido compartir los factores diferenciales que he identificado y que están basados en argumentos políticos racionales y no emocionales o puramente intuitivos.
A ambos, les deseo mucha suerte, mañana.