Hace tiempo que quería publicar una recopilación con los últimos libros que me he leído. Un semestre ya me parece tiempo, pero bueno, tampoco es que lleve un ritmo de lectura brutal, me he leído 11 libros, por lo que no va a quedar un post excesivamente largo. Además, hace meses que no publico mi " Uno al mes " y echo en falta que aparezcan libros por aquí.
Empecé el año con No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas, de Laura Norton, una chick-lit sobre la que escribí en el Uno al mes de enero.
Después me costó horrores acabar El No también ayuda a crecer, de Mª Jesús Álava Reyes. Hacía tiempo que no leía un libro sobre educación y lo cogí con ganas, pero me decepcionó. No veo justificado todo un libro para lo que dice, donde sí es verdad que aparecen varios y diversos casos, pero apenas se concretan las pautas y pasos a seguir, salvo pequeñas excepciones, que reconozco están muy bien. Sinceramente, me pareció más un folleto publicitario con " mira todo lo que podemos hacer por ti los especialistas que nos dedicamos a esto " que un manual con pautas, que es lo que yo esperaba.
Sobre Nada, de Carmen Laforet, hice el Uno al Mes de marzo, que puedes leer aquí.
El libro Gente que viene y bah!, también de Laura Norton, es otra chick-lit fresca, divertida y joven. Es un género que me gusta y necesito recurrir a él de vez en cuando. Sé que hay mucha gente que, como yo, se ha leído los dos libros de esta autora bastante seguidos, aunque no están para nada relacionados. No sé qué opinarán, pero a mí me gustó bastante más este; lo encontré más maduro.
Me había leído las dos primeras novelas de mi paisano Eloy Moreno, El bolígrafo de gel verde y Lo que encontré bajo el sofá, y me encantaron. Sé que hay opiniones para todos los gustos, pero como digo, a mí me gustaron mucho, me atraparon desde el principio y me hicieron pensar y sentir. Pero con El Regalo no me ha ocurrido igual. Para mi gusto, Eloy abusa excesivamente de la metáfora, de la comparación y de la descripción, para además hacer una historia, para mí, poco creíble. No sé, quizá esperaba algo más del estilo de los anteriores y por eso me decepcionó.
En el mar hay cocodrilos, de Fabio Geda, cuenta la historia de un niño afgano que sale de su país camino de Occidente para huir de los talibanes. Una lectura dura, de las que marcan. Un golpe de realidad; una historia actual que toca la fibra sensible, pero que, si dentro de ti todo es normal, te hace ser mejor persona. Sin duda, la lectura más recomendable de todas las que he leído esta primera parte del año. De hecho creo que debería ser un imprescindible en la ESO, una lectura obligatoria.
A Marcela le regalaron en su 8º cumple el libro de la colección de Elsa Punset El Club de las Zapatillas Rojas ¡Secretos Online!. Lo leyó, le gustó y pidió que le compráramos más libros de esta colección, pero como yo no acababa de tener claro si era adecuado para su edad lo leí. Y sigo sin tenerlo, porque si bien es verdad que las protagonistas son mayores que ella y como tal les ocurren cosas que a Marcela aún le quedan lejos, considero que trata todos lo temas (novietes / amigos especiales, padres separados, estudios...) de una forma muy sana. De momento voy alargándolo y va leyendo otras cosas, pero me lo recuerda cuando vemos estos libros en alguna tienda, aunque creo que aún esperaré un tiempo para comprarle otro.
El de El guardián entre el centeno, de J. D. Salinger, lo tenía en mi lista de pendientes desde hacía tiempo, pero ni estaba para el Kindle ni encontraba una edición que no fuera de bolsillo, ya que las detesto. Finalmente tuve que conformarme con ella. Sobre la lectura, reconozco que partía de unas expectativas muy altas y esto seguramente ha influido; me ha gustado, pero esperaba más.
Mi amigo Cas me recomendó Nosotros, los de entonces, de Marta Rivera de la Cruz, un bonito libro sobre la amistad. Un libro fácil y rápido de leer, con una una historia creíble, entretenida y con unos personajes interesantes.
El año pasado leí, como casi todo el mundo, La verdad sobre el caso Harry Quebert, de Joël Dicker. Como me gustó y me apetecía ese tipo de lectura, en cuanto vi que había salido El libro de los Baltimore lo compré, empecé a leerlo y casi no pude parar hasta acabarlo.
El libro con el que acabé junio fue Una madre, de Alejandro Palomas. Lo compré sin estar muy convencida y empecé a leerlo porque en ese momento no tenía otra cosa en el Kindle que me apeteciese más. Aunque al principio no me enganchó, me acabó pareciendo un libro precioso, con una historia conmovedora y unos personajes extraordinarios.
Pues estos son los libros que me he leído durante este primer semestre de 2016. ¿Me cuentas los que te has leído tú?