Mis mejores aliados a la hora de comer

Por Corderobeatriz

Desde que Daniela comenzó a comer sólidos, cuando tenía 6 meses de edad, mostró un buen apetito. Pero cerca de cumplir su primer año se volvió variable.

Como cualquier mamá me preocupaban esos altos y bajos. Algunos días comía los tres tiempos principales y dos meriendas (aunque fuera poco cada vez), pero otros días estaba sin querer comer o solo tomando leche.

Con el tiempo le consulté al Pediatra. El me tranquilizó diciéndome que cada niño tiene su patrón de comidas y que no debemos tratar de obligarlos. Aprendí que mientras ella aumentara de peso y talla en su control mensual, todo estaría bien. Pero eso sí, debía estar alerta y preocuparme de la calidad de sus alimentos y no tanto de la cantidad.

Aunque todos los niños pasan por períodos de bajo apetito, debemos tratar de ofrecerles variedad y nutrición. Estas etapas suelen variar en cada niño. En el caso de Daniela, la primera fue cerca del primer año de edad y ahora, cerca de cumplir los 2 años, estamos en otro quiebre.

Lo que a mí me ha funcionado es ofrecerle alimentos que le gustan, que tienen altos niveles de nutrientes y que le dan la energía que necesita. Otro recurso ha sido llevarla a la cocina para que ella elija lo que desea comer o que ayude a mezclar los ingredientes. Eso hace que se siente involucrada y que la comida le llegue por los ojos principalmente cuando colocamos la comida de forma creativa, como formando figuras.

Acá les comparto cuales son los alimentos que a mí me han ayudado.

FRIJOLES

Además de ser una gran fuente de minerales, hierro y potasio, nos pueden ayudar a motivar su independencia. Al tomar los frijoles uno por uno con las manos también ejercitan la motricidad fina. Esta característica la tiene también el cereal en aros o bolitas.

QUESO

Aporta calcio y proteínas tanto como un trozo de carne. Ofrece una gran variedad de tipos y mil formas de prepararlo y combinarlo con otros alimentos.

YOGURT

Gran fuente de calcio y proteínas. Ayuda a la digestión y se puede mezclar con frutas.

VEGETALES VARIADOS

Daniela prefiere el brócoli (le llamamos arbolitos) y las arvejas chinas, por su textura crocante al cocerlas al dente. La zanahoria cruda puede comerse como complemento o como merienda. La clave también radica en asociar la comida con algo divertido.

En cuanto a la fruta no tengo mucho problema, ya que Daniela es admiradora de Lazy Town y en la serie el personaje principal siempre hace referencia a las frutas (Dulces sanos) como sus fuentes de energía y poder. Así que cada vez que quiero que coma solo basta con que le recuerde que Sportacus come manzanas para ser fuerte y se la come sin dudar.

Otra estrategia que usamos en casa es la distracción, ya sea con juguetes, libros o hasta la computadora. Lo malo de esto es que se acostumbran a hacer cosas en la mesa que no tienen que ver con la comida.

Es mejor enseñarles a comer que hacer que coman a la fuerza. Lo ideal es que coman varias veces al día en cantidades moderadas y no tres veces comidas fuertes. Esto no solo mejora la digestión y el metabolismo, sino que es más realista, partiendo de que los niños no pueden mantener su atención en algo mucho tiempo y su estomago es pequeño.

También es importante acostumbrarlos a comer en su silla o en un lugar adecuado, a horarios determinados y en familia. Esto a la larga crea buenos hábitos. Respetar los lugares hará que no sea necesario andar tras de ellos con la comida.

En un futuro ellos nos lo agradecerán, ya que las buenas costumbres en la mesa que forjemos hoy, determinarán su forma de comer cuando sean jóvenes adultos. Recordemos que muchos desordenes alimenticios y la obesidad se derivan de comer de forma desordenada, alimentos que no son nutritivos.

Las mamis primerizas además cometemos el error de comparar a nuestros hijos con otros niños o con los hijos de nuestros amigos. En algún momento esto me generó preocupación, al ver que otros niños comían y Daniela no como yo quisiera. Al final entendí que el único referente de comparación es ella misma y que su desarrollo será a su propio ritmo.

Tomando en cuenta estas diferencias que hacen único a cada niño, les recomiendo los siguientes artículos relacionados:

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