Mi última adquisión, el bautizado por mi familia como SELFIE-PALO muy útil para esas auto-fotos que tanto nos gusta si no tenemos un brazo como el de los chicles o somos un puñao de gente posando y no salimos todos.
Una pillada de dos Pepotes a puntito de escaparse de vacaciones a lomos de unos elefantes. Nada... es que fue ver en la repisa de la cocina el salero, pimentero y azucarero y encenderse mi bombillita gansa. ¡Había que hacerles la foto!
Una confesión de mis tentaciones más profundas. Como ésta que me entra por el cuerpo cuando visito el almacén donde hago las compras de materiales. Me los traería todos toditos pero en mi casa ya no caben más cintas (una pena, una pena...)
O a la Giralda engalanada por el día del Corpus Christi, bien bonita. Para que veas que salgo del taller de vez en cuando y que no todos son osos jejeje Y de paso además presumo de ciudad y te enseño mis rincones favoritos.
¿Te apetece seguirme? ¡Yo encantada! Porque además, irremediablemente, Instagram me ha robado el corazón y se ha convertido en mi red social favorita... ¿Cuál es la tuya?
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