Noam Chomsky
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Nacimiento7 de diciembre de 1928(82 años)
ResidenciaEstados Unidos
Nacionalidadestadounidense
CampoLingüística, psicología, filosofía del lenguaje, filosofía de la mente, investigación y opiniónpolítica
InstitucionesMassachusetts Institute of Technology (MIT)
Alma máterUniversidad de Pensilvania,Universidad Harvard
Cada uno de nosotros es un conjunto de individuos que no se conocen demasiado entre sí. Yo, por lo menos, soy dos, uno físico, cuyo deterioro irreversible y progresivo contemplo aterrado cada mañana, cuando me aseo, ante el espejo y otro psíquico que permanece, allá, en el fondo, inalterable desde que tenía 14 años.Un juez es lo más parecido a Dios que existe. Todo lo que dice “ex catedra” no es que vaya a misa, es que es la misa y, sin embargo, se halla condenado a vivir la mayor parte de su vida como si fuera un hombre corriente. Es una de las más grandes tragedias da la vida.El otro día, se me murió, como del rayo, Pascual, el único componente de un grupo musical que conocía, Clam. Aparte su triunfo profesional indiscutible, económicamente, además, muy bien remunerado, era el hombre con peor suerte que he conocido, por ello apenas si me sorprendió la noticia de su repentina muerte. No era sino una desgracia más, la definitiva.Carmen es una de las mujeres de mi vida. Si me apuráis un poco, es mi mujer, porque es la única de todas las que he conocido y tratado con la que hubiera podido conversar horas enteras. Ahora, que lo pienso, no es verdad, nuestra relación que yo me atrevería a llamarla foral, de foro, de blog, está continuamente interrumpida por una serie de extravagantes circunstancias, va y viene, en mi vida, sin ningún sentido. Muy de tarde en tarde, aparece por mi blog, con una intervención que siempre es muy acertada, yo la recibo con los brazos abiertos, esperando que esta relación nuestra, epistolar, dure por lo menos un par de días. Sólo lo hace un día, porque yo, con una de mis clásicas torpezas, la espanto. En su última aparición por aquí, dijo: “yo no entiendo de fútbol”, en mi artículo inmediatamente posterior yo dije, refiriéndome a lo que yo escribía: “no es fútbol, estúpidos, es política”. Desapareció, y hasta ahora. No lo ha hecho, en cambio, neutrino, que había dicho como ella, al mismo tiempo, eso de que no entendía de fútbol y que no se dio por aludido por mi torpe expresión que, por supuesto, no iba dirigida a ellos, que no son estúpidos, ni mucho menos. Cuestión de susceptibilidades.He comprado miles de libros, que ya sé ciertamente que no voy a leer. No sé, luego, que será de ellos porque ninguno de mis 3 hijos comparte, ni mucho menos, mis gustos literarios. Uno es “Ilusiones necesarias”, de Noam Chomsky. Lo he abierto varias veces y lo he vuelto a cerrar, sin leer más de un par de páginas. Chomsky tiene 2 maneras distintas de escribir, una, la de los artículos de prensa, muy amena y asequible, otra, la de los ensayos, a la que yo, hasta ahora no he conseguido meterle mano.Dentro de un rato, cuando abran las tiendas, iré a comprar el pan y algunas otras cosas que me encarga mi mujer. Arrastraré mis doloridos pies por esas calles, de las que, cada día, me despido con cierta nostalgia, pues un día de éstos será, sin duda, el último en el que las pisaré.