El documental “Misión Congo”, que se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Toronto, alega que el dinero destinado para ayudar a los refugiados en Zaire, -que huyeron de Ruanda después del genocidio-, Pat Robertson, lo ha utilizado para financiar su empresa encargada de extraer diamantes en África.
Tras el genocidio en 1994 en Ruanda, que causó la muerte de unas 800.000 personas, un millón de ruandeses, huyeron de dicho lugar. Robertson, recomendó a los televidentes del programa “The 700 Club” -transmitido por Christian Broadcasting Network (CBN)-, que donaran dinero a Operación Bendición (Operation Blessing International) ya que la organización ayudaba a los refugiados que estaban en Zaire (hoy República Democrática del Congo).
Muchos de los refugiados fueron escondidos en los campamentos en Goma con poca, agua o casi nada de suministros médicos y alimentos. Así que Robertson, percibiendo una oportunidad, y tomando su causa, pidió a los televidentes que por lo menos donaran 25 dólares al mes a Operación Bendición Internacional para ayudar a los necesitados.
“Vamos a enviar suficiente medicamento como para cuidar de un cuarto de millón de refugios”, dijo Robertson en su momento.
Chris McGreal, periodista de diario inglés “The Guardian” que estaba estacionado en el campamento de refugiados en Goma, recordó una extraña visión. El campamento estaba plagado por una epidemia de cólera, que se cobró más de 40.000 vidas. Como las víctimas fueron trasladadas a las tiendas médicas en camillas, fue testigo que un predicador iba corriendo al lado de la camilla apretándole una Biblia y predicándole, el predicador era de la ONG Operación Bendición.
“Tenían una tienda de campaña y una pila de Biblias”, dijo un miembro de Médicos Sin Fronteras (MSF), que proporcionaron la ayuda real al campamento refugiados en Goma.
Sin embargo, “la gente empezó a rechazar las Biblias”, agregó un local. “‘Lo que necesitamos es alimentos y medicinas”, dijeron. Operación Bendición decía: “Esa no es nuestra misión”.
Los pilotos que trabajaban para la ONG, dicen que en vez de transportar la ayuda a las personas refugiadas, llevaban los aviones de carga para llevar equipo para la extracción de diamantes de la empresa de Robertson, que se encontraba a unos cientos de kilómetros de distancia del campamento de refugiados.
Según Jessie Potts, quien se desempeñó como Gerente de Operaciones de Operación Bendición en 1994, la organización dejó de enviar equipos médicos a Goma varias semanas de la operación.
En el documental Misión Congo, por David Turner y Lara Zizic, se destaca que un diario de Virginia, el Virginian Pilot, en la década de 1990, realizó una investigación por Bill Sizemore que hizo que el fiscal general de Virginia, en donde estaba registrada la ONG, pidiera una investigación de la Oficina de Asuntos del Consumidor.
La Oficina de Asuntos del Consumidor de Virginia, investigó las denuncias en contra de Robertson y concluyó que “Pat Robertson hizo afirmaciones de ayudas materiales, a través de recursos obtenidos de la televisión, destinadas al socorro humanitario. Estas declaraciones son refutadas por la evidencia”, dijo el informe. Pero la oficina del fiscal del Estado se negó a enjuiciarle alegando sólo errores.
Según The Guardian, Robertson, utilizó la actuación del fiscal como una forma de reforzar su inocencia. Se ha negado a ser entrevistado, aunque ha reconocido su empresa minera de diamantes, pero dice que es una empresa pequeña y tan solo le produjo algunas joyas.
“Misión Congo”, asegura que los políticos estatales eran los principales destinatarios de las grandes donaciones de Robertson.
Traducido y adaptado por NoticiaCristiana.com de The Guardian