Uno de los prints más destacados de esta primavera-verano son los estampados de lunares. Bien es cierto, que los "topitos" nunca han dejado de llevarse, pero es en esta temporada donde los vamos a encontrar en grandes cantidades
En Twerkin for a Birkin nos encanta saber curiosidades acerca de la moda y su historia, así que os vamos a contar un poco de donde proviene esta moda.Nos remontamos a mediados del siglo XVIII. Por esa época la aristocracia comenzó a fijar una serie de manchas en los tejidos y en 1.840 esos círculos pasaron a llamarse 'lunares'. Desde aquel instante y hasta el día de hoy, la admiración de este tejido no ha parado. Se puede ver claramente que en las pasarelas internacionales se ven inundadas de nuevas colecciones y los polk dots, rara vez, faltan a desfilar sobre ellas.
La gran ventaja de los estampados de lunares es su fácil combinación. Pero como cualquier estampado, hay que tener cuidado en que parte de nuestro cuerpo los ponemos. Sabemos que podemos encontrar lunares de diferentes tamaños y eso es algo que hay que tener en cuenta, tanto de forma positiva como negativa. Por ejemplo, si nos hemos encaprichado de una falda de lunares pero tenemos mucha cadera, lo último que queremos es aportar más volumen, en este caso los lunares deberán ser los más pequeños posible y de colores neutros. En caso contrario, si queremos aportar volumen a nuestra zona superior(por ejemplo) los topitos tendrán que ser grandes y de colores vivos.
En el post de hoy os enseñados el look que elegimos. Puesto que el plan era una tarde tranquila por Madrid, elegimos un estilismo sencillo y cómodo. Un vestido blanco ceñido a la cintura con tirantes y estampados de pequeños lunares. Los accesorios son muy sencillos, un pequeño bolso de mano y un collar "Mano de Fátima" de Las cosas de Coco Shop. Y como el color nunca debe de faltar en nuestras vidas, unos zapatos azul celeste.