¡Hola lectores!
El día de hoy hablaré acerca de ese momento en el que nos vamos a descansar para reponer energías y recobrar fuerzas, para recuperarnos luego de un día de trabajo y así amanecer con ánimos para un nuevo día lleno de retos y oportunidades, como ya habrán adivinado, me estoy refiriendo al momento de dormir.
Para algunos de nosotros, dormir es algo sencillo la mayor parte de las veces, solo es cuestión de ponernos ropa cómoda, acostarnos y cerrar los ojos durante unos momentos, antes de darnos cuenta estaremos escuchando la alarma del reloj y ya estamos listos para el siguiente día, claro, siempre y cuando logremos acumular suficiente fuerza de voluntad como para levantarnos de la cama, lo cual no siempre es sencillo, sobretodo cuando la mañana está demasiado fría y para levantarse hace falta una fuerza de voluntad sobrehumana.
Pero hay algunas veces en las que dormir no resulta sencillo, y algo que debería tomarnos unos pocos momentos nos toma varios minutos o incluso más de una hora, cuando no logramos dormir sin importar cuando lo intentemos o cuantos métodos utilicemos para lograrlo.
Es en ese momento cuando muchos se ponen realmente filosóficos y pensativos, la inspiración les llega de repente y son capaces de escribir verdaderas obras maestras mientras resuelven los problemas del mundo, incluso hay personas que siempre tienen lápiz y papel a mano para escribir las ideas antes de quedarse dormido y olvidarlas.
Otras personas deciden contar ovejas, esta es una costumbre bastante conocida, en lo personal creo que lo intenté una vez hace ya un par de años y no funcionó, si a ustedes les resultó pueden comentar hasta que número llegaron antes de quedarse dormidos.
Otros deciden beber algo frío o quizás caliente esperando que eso los ayude a dormir, ese es un buen método ya que ayuda a relajarse, es importante mencionar que con algo frío o caliente no me refiero ni a bebidas energéticas ni a café, aunque parecerá algo obvio, nunca está de más mencionarlo, solo por si acaso, ya que si hicieran eso tienen casi asegurado una noche sin dormir.
A veces las razones por las que no dormimos es debido a algún vecino que decide poner música a todo volumen o por alguna fiesta cercana, en esos casos hay que ser creativos para buscar maneras de resolver esa situación, se pueden tapar las ventanas para reducir el ruido y las luces, se pueden usar tapones de oídos o hacer un plan extremadamente elaborado para transportar el local de la fiesta a una quinta dimensión usando solamente una licuadora, medio pan tostado, un cubo rubik y un DVD de música clásica, o quizás decidan que ya que no pueden dormir, aprovechar e irse a la fiesta.
Conforme el tiempo va pasando uno puede llegar a desesperarse al ver que no consigue dormir, quizás nos pongamos de malhumor, por suerte debido a la hora no recibiremos visitas, sino lo más probable es que esa persona terminaría siendo lanzada por alguna ventana, es en esos momentos cuando lo recomendable es mantenerse lo más alejado posible de cualquier explosivo.
Luego de una mala noche, muchos de nosotros pasaremos parte del día siguiente en un estado conocido como modo automático o modo zombie, cuando no estamos funcionando a nuestra máxima capacidad, olvidamos casi todo, andamos por todos lados distraídos y corremos el riesgo de quedarnos dormidos en cualquier momento, incluso mientras estamos de pie esperando algo, por suerte esto se soluciona durmiendo un poco más la noche siguiente.
Y con esto dicho, solo me queda dar por terminada la publicación y despedirme por ahora, si de repente escuchan explosiones durante la noche, quizás signifique que sigo despierto y posiblemente de mal humor, les deseo a todos una excelente semana y espero que nadie tenga problemas para dormir.
Hasta luego.