¿CÓMO SE APARCA EN MADRID?... DE GOLPE A GOLPE…
Una costumbre muy extendida en los coches de Madrid, junto con la de no poner intermitentes y si los tienen no hacer uso de ellos, es aparcar de oído, vamos lo que se ha dicho de toda la vida, aparcar de golpe a golpe. ¿O porque carajo creéis que bajamos la música inconscientemente y de forma automática a la hora de aparcar? No es para aumentar nuestra concentración, es para oír cuando le damos el “golpecito” al de detrás y al de delante, poder frenar a tiempo y que la cosa no llegue a mayores. Una cosa quiero aclarar…No es que en los pueblos no se aparque de golpe a golpe…Que también se hace si es necesario…Es que allí, en los pueblo me refiero, si hay sitio para todos los coches que hay y por muy lejos que aparques siempre estas cerca, pero en Madrid no hay aparcamiento para tanto coche, así que hay que recurrir más a esta técnica a la hora de aparcar.
Seguro que alguno, de esos que se consideran “expertos al volante”, estará pensando que esta práctica es más de mujeres…Pues no, perdonadme que os corrija, pero no. Cuando el que aparca con esta técnica es un tío, es peor, porque probablemente en ese momento estén el que esta aparcando y un amigo fuera dirigiéndole la maniobra para que meta un coche de dos metros y medio de largo, en un hueco de dos metros y esto encima sin “querer” rozar al de detrás ni al de delante….Vamos, el más difícil todavía. Pero así son los tíos al volante a la hora de aparcar, como piensen que en el único hueco que acaban de ver cerca de su destino hay una remota, pero muy, muy remota posibilidad de aparcar el coche, harán todo lo posible para aparcarlo, así sea necesario recortar un poquito al coche del capo y del tubo de escape. Eso sí, si en esa peripecia del más difícil todavía rozan a cualquiera de los coches de alrededor, por supuesto que la culpa la tienen los otros coches por estar mal aparcados y siempre llegará otro tío que le acabará diciendo: ¡Pero cómo has hecho eso si en ese hueco te cogían dos coches!...Claro, dos coches..Siiiii…De juguete…Y después de oír esa frase, para el próximo aparcamiento imposible intentarán superarse…. Aviso: si intentan superarse, tened también a mano el parte del seguro que os va hacer falta.
Reconozcamos que la forma de aparcar de golpe a golpe es muy… Digamos…Tradicional en Madrid… Primero porque, como he dicho antes, no hay sitio para tanto coche. Segundo porque no nos gusta andar y si lo podemos dejar cerca de nuestro destino aunque sea con dificultades muy jodidas, lo dejamos, con tal de no andar dos pasos más. Tercero por aquello del orgullo, si decimos que algo entra en un sitio…Entra y punto… ¿Hay que meter el coche en un hueco más pequeño que él mismo coche?... ¡Y se mete!, aún con daños propios y a terceros, ¿Por qué?, porque luego hay que presumir delante de los amigos de lo bien que aparcamos el coche en espacios reducidos. Cuarto porque a todos nos gusta ir en coche a todas partes y así nunca hay sitio para aparcar, y cuando digo nunca es nunca, tienes que pasarte dos horas dando vueltas a tu destino, que a veces tardas más en aparcar que en llegar, con la ínfima esperanza de que alguien decida irse con su coche, para que como si de una carrera de 100 metros lisos se tratara, hacer un sprint y meter el morro en ese hueco como si no hubiese un mañana y de ese modo que nadie te lo quite. Y quinto y no menos importante…Porque a todos nos gusta aparcar gratis y eso de meter el coche en un parking o en zona verde o azul, aunque así aumente nuestras posibilidades de aparcar…Como que no.
Por todo esto, es muy normal que se vean en los coches de Madrid, unos pequeños arañazos en el parachoques delantero y trasero de todos los colores de pintura para coches que exista en el mercado, son pequeños recuerdos de nuestra “gran pericia” al volante a la hora de aparcar…De oído…Heridas de guerra…Que como el oído no ve…Pues nos deja ese pequeño recuerdito a la vista para que a la próxima vez afinemos mejor nuestro sentido auditivo.
Ahora en previsión de la cantidad de partes de accidente que se debieron de dar a las compañías de seguros por este motivo, han inventado un dispositivo en los coches que pita cuando te estás acercando a otro coche al aparcar, por lo tanto ahora el sonido es doble, el del ruidito que hace el coche y el rudito que hace el golpe. Porque aunque los coches te avisen, aquí todos somos tan cabezones que hasta que no comprobamos con nuestros propios medios que efectivamente el otro coche esta cerca, no paramos…¿Y eso como se comprueba?…Aparcando de golpe a golpe…Hay cosas que es mejor comprobarlas por uno mismo… Y por el parachoques de tu coche que para algo se le puso el fabricante….Habrá que darle uso.
Ya nos pueden poner cincuenta mil dispositivos para detectar ochocientas mil cosas que son más que obvias, que hasta que no comprobamos por nosotros mismos esa obviedad no paramos, así lleguemos a provocar daños propios o a terceros. Pero esto no ocurre solo con el tema de aparcar, ¡¡¡¡noooooooo!!!!…Vale para todo…Por que la naturaleza del ser humano tiene esas cosas, que dejó bien claras al plasmarlas en un refrán…”Si no lo veo, no lo creo”, y efectivamente por más claro que tenga que uno y uno son dos…Metros…Mejor comprobarlo por si acaso...A ver si va a ser que nuestra furgoneta de tres metros puede llegar a entrar. Hasta que la mayor evidencia del mundo no la comprueba por sí mismo no se queda tranquilo. Para mí esto es un claro ejemplo de dos cosas, la primera es que el hombre tiene perdida la fe en el hombre, en los avisos que este le pone y en su propia capacidad de percibir la realidad y de paso, todo sea dicho, en la mujer, sobre todo a la hora de conducir… Y de aparcar mejor ni hablamos, claro que la mujer para todo lo demás nunca tuvo mucha fe en el hombre, todo sea dicho. De esta forma prefiere comprobar por el mismo que el coche no coge a no ser que le roces un poquito contra el de atrás y otro poquito contra el de delante…Aunque solo sea por aquello de que el roce hace el cariño… Y lo cariñosos que se van a poner los dueños de los otros dos coches cuando lo vean…Y la segunda que lo de tropezar en la misma piedra lo tenemos incorporado por naturaleza…Aunque nos avisen…O chocar al aparcar dos veces con el mismo coche…Como lo queráis mirar.
P.D.: Si te gusta la lectura puedes leernos también en: http://www.puntorojolibros.com/todas/Ironias-de-la-vida.htm