Más de una vez seguro que habréis pensado en por qué se escriben ciertos monosílabos con tilde y no otros, ¿verdad? Bueno, pues vamos a poner un poco de luz gracias a la RAE.
Reglas de acentuación
De todos es sabido que los monosílabos no llevan tilde. Es una de las reglas generales de acentuación. Entonces, ¿por qué hay algunos monosílabos con tilde? Esta tilde se llama tilde diacrítica y sirve para diferenciar palabras que se escriben igual pero poseen distinto significado.
En condiciones normales, los monosílabos no se tildan, ya que, al ser una única sílaba, el acento recae en toda ella. Pero hay monosílabos que requieren de la tilde diacrítica para poder diferenciarse.
Monosílabos con tilde
Los monosílabos con tilde se suelen usar frecuentemente. Os vamos a poner cuáles son y ejemplos de cómo usarlos.
- Más y mas. Más es un adverbio que indica, delante de otro adverbio o adjetivo, el grado de una propiedad: La casa era más grande que la nuestra. Mas, sin tilde, es una conjunción equivalente a pero: La lluvia caí, mas los soldados no pararon la marcha.
- Dé y de. Dé es la primera y tercera persona del presente de subjuntivo e imperativo (con usted) del : . En cambio, de es una preposición que, por otro lado, es muy utilizada: .
- Té y te. Té es un sustantivo que designa una planta con la que se hace infusión: Me gusta el verde con naranja y jengibre. Los japoneses celebran la ceremonia del té. Te, sin tilde, es un pronombre átono de segunda persona: voy a dejar mi cuaderno. Ahora te traigo la comida.
- Tú y tu. Nos encontramos con uno de esos pronombres que tantas veces vemos mal utilizado cuando navegamos por la red... Tú, con tilde, es pronombre personal tónico de segunda persona de singular: Tú tienes que venir. Tú haces la cena. Tú compras el pan. Tú fuiste a Ginebra. Y tu, sin tilde, es adjetivo posesivo y, por tanto, no se tilda: .
- Él y el. Aquí estamos ante otro hueso duro de los monosílabos con tilde. Él, al igual que tú, es un pronombre personal tónico de tercera persona singular, en este caso: . Y el, sin tilde, es un determinante artículo, masculino y singular: .
- Mí y mi. Más pronombres para nuestra lista. Mí se refiere a la primera persona de singular cuando va precedido de preposición: . Mi, sin tilde, es un adjetivo posesivo: .
- Sí y si. Sí es el adverbio de afirmación: , iré a tu fiesta. También es un pronombre de tercera persona, tanto singular como plural: No podía hacer nada por sí solo. Querían ganar por sí mismos. Y si, sin tilde, es una conjunción:
- Sé y se. Sé es el imperativo del verbo ser y la primera persona del presente de indicativo del verbo saber: Sé paciente. Yo sé hacer bizcocho de chocolate. Se, sin tilde, es pronombre personal de tercera persona, nuevamente de ambos números: Se compraron una casa el año pasado. Se mudó hace dos meses.
Monosílabos que ya no llevan tilde
Seguro que os preguntáis por ciertas palabras que no han entrado en nuestra lista. Tranquilos, os lo vamos a explicar.
Hay palabras que perdieron su tilde hace unos cuantos años ya. En 2010, la RAE publicó su Ortografía y, como novedad, ciertas palabras que habían llevado tilde, dejaron de llevarla. Es el caso de los siguientes monosílabos: guion, truhan, pion, ion, prion, Ruan y Sion. Estos, como os comentaba, llevaban tilde, pero, al considerarse monosílabos, dejaron de llevarla. Os pongo un fragmento del Diccionario Panhispánico de Dudas a este respecto:
No obstante, es admisible acentuar gráficamente estas palabras, por ser agudas acabadas en -n, -s o vocal, si quien escribe articula nítidamente como hiatos las secuencias vocálicas que contienen y, en consecuencia, las considera bisílabas: fié, huí, riáis, guión, truhán, etc.
Diccionario Panhispánico de Dudas, 2005
Con la nueva Ortografía (2010), este supuesto se elimina y ya no es correcta la tilde. Os dejo unas cuantas referencias:
Ti y la tilde
Por algún motivo, supongo que por analogía con la forma mí, a veces nos encontramos con usuarios que . Sin embargo, ti nunca ha llevado tilde ni puede llevarla. El pronombre ti, que es la forma átona de cuando va precedido por preposición (el mismo caso que mí, entonces), no tiene homónimo con el que confundirse, es decir, no existe un ti átono y otro tónico, por lo tanto, no debe llevar tilde en ningún caso. Es un rasgo que hay que recordar, pues parece que, como mí lleva tilde, también debe llevarla ti, pero es un grave error que tenemos que corregir.