Qué poquito hace falta para liarla en internet, y qué talento desbordan algunos. Ya saben que en esto de abandonar un trabajo hay quien opta por una breve carta de dimisión o bien quien se anima a cantarla de viva voz en YouTube. Todo vale, y si es para labrarse un futuro mejor, el formato de la comunicación es lo de menos. ¿O tal vez no? En el condado británico de Cambridgeshire hay quien piensa que al cerrarse una puerta se abre otra, y las ocasiones están para aprovecharlas.
Nuestro peculiar protagonista, Chris Holmes, es un agente de fronteras que desempeñaba su labor en el aeropuerto de Stansted. Un trabajo que le aportaba seguridad y que le sirvió para formar una familia y disfrutar de sus hobbies, pero que le robaba demasiado tiempo. Fue precisamente esta familia y la reciente paternidad los que hicieron que se planteara el futuro de otra manera. Bueno, eso y su secreto as en la manga: un floreciente negocio online de repostería. La decisión estaba tomada. Se acabaron los controles de pasaportes en ventanilla, los madrugones, los atascos y perder de vista a los suyos de sol a sol. Holmes quería disfrutar de su casa victoriana y su tiempo libre, pero sobre todo deseaba ver crecer a su hijo. Como apuntábamos, desde 2010 nuestro protagonista de la jornada mantenía un pequeño negocio online de venta de tartas personalizadas que bautizó como Mr Cake. Y lo que empezó como afición fue, con el tiempo, consolidándose como una idea genial que iba acumulando pedidos. De agente de fronteras a emprendedor de éxito casi sin asumir riesgos. La cocina de su casa se convirtió en poco tiempo en una máquina de hacer dinero. El ‘señor tarta’ se hizo mayor.