Monty Clift (II)

Publicado el 24 mayo 2015 por Lu
Yo confieso

Un sacerdote escucha la confesión de un criminal. Cuando las circunstancias implican al cura, y las sospechas de la policía recaen sobre él, entonces tendrá que afrontar una espinosa situación: no puede contar lo que sabe; tiene, pues, que encubrir al culpable porque está obligado a respetar el secreto de confesión.
Una de esas películas que se me ha quedado grabada a lo largo de los años, y que ahora vuelvo a ver. Y las sensaciones son igual de fuertes. Una historia muy bien construida. Fuerza dramática y de intriga, grandiosas. Sublime la interpretación del atormentado Montgomery Clift. Ese rostro de rabia contenida, de silencio que lo puede llevar a la muerte. Actitud de protección frente a otras personas. Y el culpable, cada vez más fuerte, sabedor de la entereza del cura.

Magia en lo simple. Sabemos desde el principio lo que ha sucedido, y vamos siguiendo todo el proceso que se va complicando a medida que el juicio avanza.

Título original I Confess. DirectorAlfred Hitchcock. Guión George Tabori & William Archibald (Novela: Paul Anthelme). Música Dimitri Tiomkin. Fotografía Robert Burks (B/N). Reparto Montgomery CliftAnne BaxterKarl MaldenBrian AherneO.E. HasseDolly Haas,Roger DannCharles AndréJudson Pratt. EE UU 1953, 95 min.
De repente el último verano

En la Nueva Orleans de 1937, una rica viuda, la señora Venable, ofrece al doctor Cukrowicz los fondos para crear un hospital a condición de que practique una lobotomía a su sobrina Catherine. La señora Venable se encuentra perturbada por la reciente muerte en Europa de su hijo Sebastian, con quien solía viajar todos los veranos, salvo el último, en el que Sebastian prefirió llevar como acompañante a su prima Catherine.

Perturbadora y angustiosa. Una obra maestra. Nombres ilustres, desde el director, guionistas y actores. Asfixiante ambientación (ese jardín-selva, esa playa y el pueblo del último verano). Los recuerdos que van emergiendo, al son de una percusión atronadora, se hacen insoportables para quien los sufre y para los espectadores. La locura que provoca la pérdida. Culpas y culpables. Duelo Hepburn – Taylor, soberbias ambas. Desenlace que pone a cada uno en su lugar, resolviendo el enigma.

Mucho se ha hablado de las nefastas relaciones del director con los actores durante el rodaje. En su momento resultó un guión escandaloso donde se abordaba la homosexualidad, el desequilibrio mental y una enfermiza dependencia madre-hijo. Vamos, todo lo contrario a la moral dominante, temas desagradables. Psiquiatría aterradora ante la que se abren nuevas perspectivas.

Una curiosidad: en la versión doblada ese lugar espantoso y depravado del verano maldito se sitúa en un lugar indefinido. Escenas rodadas en España, y en la versión original Elizabeth Taylor comenta que no entendía el español.

Título original Suddenly, Last Summer. DirectorJoseph L. Mankiewicz. Guión Tennessee Williams, Gore Vidal (Teatro: Tennessee Williams). Música Buxton Orr & Malcom Arnold. Fotografía Jack Hildyard (B/N). RepartoElizabeth TaylorMontgomery CliftKatharine HepburnAlbert DekkerMercedes McCambridgeGary RaymondJoan Young. EE UU 1959, 114 min. Premios: Globos de Oro: Mejor actriz - Drama (Taylor). David di Donatello: Plato dorado (Elizabeth Taylor)
VER Monty Clift (I)