¿Por qué una película como ‘Monuments Men’ merece la pena pese a distar de ser una obra remarcable? Esta cuestión puede que tenga que ver con cierto romanticismo sobre las múltiples películas que a lo largo de la historia ha regalado el género bélico. Cierto es que la guerra, como tal, tiene más bien nada de bonito y engloba todos los males e injusticias del ser humano. Ahora bien, si obviamos las películas belicistas, y dejamos a un lado las grandes obras antibelicistas, aún quedan esas otras películas más ‘ligeras’ o suaves, que se desarrollan en medio de una guerra. Aquí podemos englobar la película que nos ocupa.
A mi mente vienen películas como ‘La gran evasión’ o ‘El puente sobre el río Kwai’. Por ello, y en razón a este tipo de cine bélico, ‘Monuments Men’ cumple con creces el fin de situarnos en un momento como la Segunda Guerra Mundial para contarnos una historia que poco tiene que ver con la guerra y que sin embargo sucedió realmente en aquellos fatídicos años de la historia.
George Clooney es puro carisma, eso ya se sabe; pero además, si está acompañado de gente como Bill Murray, John Goodman, Cate Blanchett o Matt Damon, el peso de complacencia que genera ver a tanto artista junto juega sin duda a favor de la película con sólo ver los títulos iniciales. Digamos que la película hace que estés predispuesto a que te guste, posee todos los elementos necesarios para triunfar y convertirse en una película que siempre verás cuando la pongan un domingo en la televisión como sucede con ‘Doce del patíbulo’ o incluso ‘Malditos bastardos’. Sin embargo, la sensación no acaba de ser completa.
George Clooney dirige con gusto y oficio una película donde la importancia de Miguel Ángel como artista universal se remarca más que el desembarco de Normandía. Y esto me parece bien, pues podemos sacar un mensaje claro sobre la importancia del arte como bien cultural universal que debemos preservar. No creo que nadie descubra una obra maestra en esta película; no obstante, ‘Monuments Men’ entretiene pese a no acabar de ubicarse, quizás por un exceso de prudencia a la hora de abordar el tema, no lo sé. Pero si eres de los que disfruta de los viejos clásicos bélicos seguro que disfrutas de esta peculiar historia dentro de la historia.
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