Morasol, el último cine del barrio de la Prosperidad

Por Enrique23

Cine Morasol cerrado. (Foto: Enrique F. Rojo, 14 de mayo de 2013)

Hace unas tres semanas que el cine Morasol, situado en la calle Pradillo, 6 de la Prosperidad, no abre. Era el último cine del barrio y de sus alrededores que permanecía en activo. Se inauguró en el año 1964, cuando todavía acudir al cine el fin de semana era una de los entretenimientos más populares en todo el país. En la programación de sus primeros años se proyectaron películas como El circo,con Cantinflas; El Vampiro de Düsseldorf, de Fritz Lang; diferentes títulos de la saga del Zorro; El joven Winston, de Richard Attenborough ; etc.

Planta de cine Morasol. (Plano: Web Estudio López-Izquierdo)

En la Prosperidad el Morasol convivía con los cines López de Hoyos (antes salón Moderno), el Cinestudio Covadonga y el Royal, todos ellos en la calle López de Hoyos. En la misma calle, bastante más arriba se encontraba el cine Ciudad Lineal. Cerca de la Guindalera, pero también competidores del cine Morasol, se encontraban el Bahía, el Mónaco y el modernísimo Marvi, los tres en la calle Cartagena.

Antiguo cine Marvi, en los años sesenta del siglo XX.

Hacia Chamartín, en la calle General Mola (Príncipe de Vergara) estaban los cines Roma y el Juan de Austria.
En su momento, la apertura del cine Marvi, en la calle Cartagena casi esquina Avenida de America, desbancó a los que salpicaban López de Hoyos. Este cine, abierto en 1958, fue durante los 60 el más moderno de la zona. También tenía programas dobles y al estar a mitad de camino entre el barrio de Salamanca y los de la Guindalera y la Prosperidad, competía con el Oraa y con el Silvela, a la vez que con el Lopez de Hoyos, con el Covadonga y con el Morasol.
El Marvi desapareció en 1980 y comenzó a funcionar como bingo -Sala América- hasta el año 2008 que cerró definitivamente. En los bajos del cine Marvi estaba la sala de fiestas “El Cisne Negro”.

Antiguo cine López de Hoyos. Cuando cerró se convirtió en una salón de bodas y banquetes. Hoy es un gimnasio. (Foto: Blog Eloy Peña Rico)

La década de los ochenta del siglo pasado fue nefasta para los cines, especialmente para las grandes salas que eran incapaces de completar su aforo, a pesar de estrenar las producciones más atractivas del mercado. Muchas salas se reconvirtieron en minicines y aguantaron hasta donde pudieron. Los cines grandes de los barrios se transformaron en bingos y en salones de bodas y banquetes y , ya en la década de los noventa, algunos mutaron en gimnasios, como el Roma o el López de Hoyos. De los cines pequeños que no continuaron su actividad la mayoría se transformaron en supermercados de grandes cadenas o en franquicias de ropa.

Antiguo cine Royal. Tras su cierre se convirtió en un bingo. Ahora puede que se transforme en un supermercado. (Foto: Blog Eloy Peña Rico)

En 2006 una reforma del Ayuntamiento por la que las salas podían cambiar su uso urbanístico, con las salvedades de que los edificios que gozasen de protección urbanística tendrían que asegurar la conservación de sus elementos arquitectónicos y culturales, y que los nuevos usos del inmueble tendrían que ser compatibles con la integridad de palcos, tramoyas y escenarios, posibilitó el cierre de muchas salas que aún funcionaban.
Este cambio en la legislación unido al hecho de que la mayoría de los cines pertenecían a unas pocas sociedades, produjo que estas cerrasen las salas casi de forma conjunta con la intención de sacar partido a las plusvalías que generaba la recalificación.

Antiguo cine Juan de Austria. Después de convertirse en un supermercado, el local se encuentra cerrado. (Foto: Blog Eloy Peña Rico)

El cine Morasol también sufrió la crisis de los ochenta y en febrero de 1980, cuando exhibía el Secreto del Toisón de Oro y Una Tarde en la ópera, de los hermanos Marx,  en sesión continua al precio de cinco duros, el mismo mes que en el cine Gran Vía se estrenaba Mad Max, echó el cierre.
En 1982 volvió a abrir, esta vez no como cine sino como sala de conciertos, aunque mantuvo su nombre (Sala Morasol). Sin embargo, a pesar de convertirse en un referente de la “movida”, junto con la sala “Marquee” y la sala “Rock-Ola”, los antiguos cine Bahía y Mónaco, las numerosas denuncias de los vecinos y las continuas molestias que el público que acudía al local generaba en el barrio durante las madrugadas, obligó a su cierre en junio de 1984. (La sala Morasol llegó a ser una de las más conocidas y frecuentadas por la gente joven madrileña, y fue lugar de conciertos de los grupos más famosos del panorama musical español de los ochenta. La Morasol, como se la conocía, carecía de licencia de instalación, apertura y funcionamiento, además de superar ampliamente, según los técnicos municipales, el nivel de decibelios permitidos, lo que originaba la transmisión de vibraciones y ruidos molestos a los vecinos-.El País, 9 de junio de 1984).

Interior del cine Morasol, en la calle Pradillo. (Foto: Web Estudio López-Izquierdo)

Sala principal del cine Morasol. (Foto: Web Estudio López-Izquierdo)

Pero, como el Ave Fénix, en 1997 el Morasol resurgió de sus propias cenizas y abrió de nuevo como cine multisalas, ligado a la sociedad Exhibidores Unidos del empresario valenciano  Bautista Soler, propietaria también del Juan de Austria y que llegó a tener 40 salas de cine en Madrid capital.
EJuan de Austria cerró en 2007 al amparo de la reforma del Ayuntamiento de Madrid, y transformó el antiguo cine en un Open Cor, ahora también cerrado y en una sala de ensayo de la Compañía Nacional de Teatro Clásico.
El cine Morasol, aguantaba como multicine de seis salas, hasta hace unas tres semanas. Pero, desde entonces no ha vuelto a abrir. Y parece que esta vez va a a ser el adiós definitivo del último cine del barrio de la Prosperidad.

Referencias.-

El crepúsculo de las salas (El País, 2013)

Sin grandes cines en las calles de Madrid (Revista Profesiones, 2007)

Salas de cine: Morasol (Estudio de arquitectura López-Izquierdo)

“The end para el cine de barrio“. Cine Marvi. (El País, 23/03/2012))