10 siglos de desarrollo urbanístico han permitido que Praga sea una de las ciudades con mayor patrimonio arquitectónico: Gótico, Renacentista, Cubista, Barroco, Rococó, Románico... Estilos diferentes pero enlazados mediante una trama de mosaicos decorativos de piedra caliza de varios colores: negro, gris, blanco y en ocasiones rojizo.
Este tipo de pavimentación comenzó a finales del s.XIX y perduró hasta mediados del s.XX debido a la buena calidad del mármol de canteras cercanas a la ciudad. Existían patrones catalogados de mármol rojizo y gris utilizados repetitivamente. Pocos empedrados de aquella época perduran hoy en día, sin embargo sí que ha sido recuperada ésta tradición, aunque ahora los colores que predominan son el blanco y el gris, y hay hasta 25 mosaicos diferentes. Algunos conservacionistas no están de acuerdo con ésta sustitución, pero lo que no hay duda es que la 'Praga Empedrada' ¡me encanta!.
Como homenaje a las víctimas del holocausto se pueden encontrar placas conmemorativas sustituyendo piedras, pero yo no encontré ninguno.
Vamos a dar un paseo muy especial por Praga...
Detalle del encuentro entre vado en acera y carril para vehículos rodados
Piedra rojiza, color utilizado en el origen de los empedrados
¿Qué mosaico te gusta más?. Recuerda: Cuando visites Praga no olvides un buen calzado ni mirar al suelo...