Aunque es muy dificil llevarlo a cabo en esas circunstancias, tenemos que esforzarnos en planificar cada día unas acciones que nos ayuden a motivarnos. Pequeñas acciones harán que poco a poco nuestra forma de ver las cosas vaya cambiando, y sin darnos cuenta, empezaremos a ver la vida desde otro prisma totalmente diferente. No hacerlo supone un alto riesgo de caer en el pozo de la depresión.
Es duro, pero tienes que tener el propósito y comprometerte a que cada día debes hacer al menos una acción encaminada a motivarte, aunque lo ideal es combinar vaarias actividades diferentes por día. Te recomiendo que tomes una libreta o una agenda y hagas un plan de acciones para cada día de la semana. Puedes planificar, por ejemplo, los próximos 7 días. En el sexto día planifica los 7 siguientes, y así sucesivamente. A continuación te expongo una relación de acciones que de ponerlas en práctica te ayudaran mucho a sentirte mejor anímica y físicamente en poco tiempo. Ten en cuenta que poco a poco se llega muy lejos. Un trayecto de mil kilómetros empieza con un paso de 40 centímetros.
1.- Habla, contacta y reunete con amigos que piensen en positivo. Evita las lamentaciones y hablar de tu problema con ellos. Simplemente distráete.
2.- Acude al menos una vez en semana a un acto público, o evento social o cultural, (cine, teatro, concierto, etc.).
3.- Haz algún deporte aeróbico ( caminar, correr, ciclísmo, etc.).
4.- Lee algún libro de autoayuda.
5.- Evita pensar en el pasado y en lo sucedido. Esfuerzate en pensar y hacer planes de futuro.
6.- Escucha música alegre que estimule el buen ánimo. Evita canciones o melodías románticas, música clásica, canciones de amor y desamor.
7.- Sé entusiasta con las pequeñas cosas. toma conciencia del momento presente. Disfruta comiendo una fruta, viendo una puesta de sol, sintiendo el viento en la cara, contemplando un paisaje, etc.
8.- Sal de la rutina cada día haciendo algo diferente. No vayas al supermercado por las mismas calles de siempre. Cambia la ruta. Cambia de oficina bancaria, visita a tus amigos o familia en día y horarios diferentes al que siempre lo haces.
9.- Date pequeños caprichos. Come en ese restaurante que siempre has querido y nunca lo has hecho. Cómprate ese detalle o ese aparatito que desde hace tiempo deseas y no lo has hecho.
10.- Busca en libros o en Internet frases positivas y motivadoras y copialas o escríbelas. Luego leelas cada día.
11.- Habla con amigos y familiares de confianza y compromételos a ser colaboradores tuyos para que te inciten a hacer actividades. Te inviten a actos y eventos. Se unan a tus actividades deportivas. Etc.
Te podría seguir detallando muchas más acciones. De momento toma buena nota de los que aqui te relaciono y ¡¡¡Manos a la obra!!.