Para la piña caramelizada:
Una piña natural
50 gramos de azúcar
Para el mousse:
1 lata de piña en almíbar grande
Una lata de leche condensada
Un sobre de gelatina sabor piña (Usé Royal)
250 ml del almíbar de la piña
Para la decoración:
Conos de helado y obleas (tantos como vasos)
Chocolate blanco unos 150 gramos para bañar 9 conos
50 gramos de nata líquida
30 gramos de mantequilla.
Decoraciones de azúcar colores de Navidad.
Preparación:
Empezamos caramelizando la piña natural. Para ello la troceamos pequeñita la escurrimos bien, incluso secándola en una servilleta de cocina y la ponemos en una sartén pincelada de aceite a fuego fuerte. Cuando empiece a dorarse añadimos unas cucharadas de azúcar blanco o moreno y dejamos que se forme caramelo. Si fuera necesario añadiremos un poco de agua para que el caramelo no endurezca. Retiramos del fuego y dejamos enfriar.
Preparamos también la decoración derritiendo el chocolate blanco con la nata al baño maría, cuando esté disuelto añadimos la mantequilla y removemos. Pasamos la mezcla a un plato hondo para bañar con cuidado nuestros conos y obleas. Antes de que el chocolate blanco se seque salpicamos con los adornos de azúcar de colores navideños y dejamos secar.
Para preparar la mousse trituramos la piña de la lata bien escurrida y pasamos a un bol, mezclamos con la leche condensada. Calentamos en el microondas el almíbar que habíamos reservado de la lata y disolvemos en él los polvos de gelatina sabor piña. Dejamos enfriar un poco y lo mezclamos con la piña y la leche condensada.
Montamos los vasitos poniendo en el fondo un poco de piña caramelizada, con cuidado añadimos la mousse y dejamos enfriar bien en la nevera. Mejor de un día para otro. En el momento de servir adornamos con la oblea y el cono a modo de sombrero o de árbolito de Navidad.
¡Que sean felices!
¡Hasta la próxima!