Moverse en Nueva York

Por Lamaletademarta
DEL AEROPUERTO A MANHATTAN 
Llegamos a Nueva York. A la emoción de pisar territorio americano y de haber establecido nuestra primera conversación con un policía neoyorquino se le suma el subidón de ver el primer taxi amarillo. Así que la primera vez no dudamos en pagar los 60 dólares -algo más con la propina- que cuesta llegar a la gran manzana.
OPCIÓN A. TAXI AMARILLOSe trata de una opción muy recomendable. La entrada a Manhattan es espectacular y mítica en tan célebre atracción. El taxista, con mucho arte, os preguntará: "Guachugon?", o lo que es lo mismo: "Where are you going?". Estas primeras conversaciones, aparentemente triviales pero que tienen su complejidad, también son apasionantes para el recién llegado ;D

OPCIÓN B. FURGONETA -SHUTTLE-En la puerta del aeropuerto hay muchas furgonetas. La compañía más conocida es Super Shuttle. Pueden llevar hasta ocho o diez personas a la vez y es bastante más económico que el taxi, pero al ir dejando en sus destinos a todos los pasajeros se tarda un poco más. Está muy bien de todos modos.

OPCIÓN C. GERARDO GIRALDO 
(furgoneta, limusina, autobús,...)Además de realizar excursiones magníficas, el Sr. Giraldo cuenta con servicio de recogida y traslado al aeropuerto. Los costes son los mismos que los de un taxi. Al ir más de cuatro personas hay que desplazarse en un medio de transporte con mayor capacidad para que quepan las maletas, así que es una buenísima alternativa. Cuando el año pasado contratamos este servicio, Gerardo se quedó sin furgonetas y nos recogió, por el mismo precio, en limusina. Fue una grata sorpresa, la verdad.

OPCIÓN D. AIR TRAIN JFKEs nuestro último descubrimiento y nos encantó. Esta opción es muy económica y muy rápida. En el aeropuerto JFK está la estación del air train -también hay en Newark-. No tiene pérdida porque solamente se puede coger un tren cuyo recorrido es circular. El ticket no se saca en el aeropuerto, sino al llegar a la estación de JAMAICA, que es la que conecta con otros trenes y con el metro. Así que, una vez en ésta, hay unas máquinas verdes, dos concretamente, en las que se saca el ticket por cinco dólares. Junto a ellas hay otras máquinas verdes oscuras, más pequeñas, donde se puede sacar el billete de tren urbano  -LIRR- o el billete de metro a la estación que más convenga. Vale unos siete dólares, depende del destino. Nuestro hotel estaba en Penn Station, así que cogimos el LIRR que llega a esa estación y tardamos 15 minutos aproximadamente. Se pueden ver las conexiones pinchando aquí.

La vuelta la hicimos igual. Desde Penn Station salen trenes a múltiples destinos y muchos de ellos tienen parada en Jamaica. Eso sí, hay que ir con tiempo porque los controles de los aeropuertos de NY son tremendos. El 100% de los que volamos la última vez pasamos por la misma fila, facturamos en el mismo sitio y fuimos revisados por los mismos policías. En fin, se nos fueron más de tres horas hasta llegar a la puerta de embarque. 
EN LA GRAN MANZANA
El metro es ideal -subway-. No solo porque es una celebridad más, sino porque en efecto funciona fenomenal. Básicamente hay que tener en cuenta tres cosas:
    1. Si se sube hacia el norte hay que buscar los "UP".
    2. Si nos dirigimos hacia el sur, "DOWN".
    3. Si se cruza a lo ancho, la línea S.
Todo un lujo, vaya. Y, como en tantos otros metros, hay que mirar el color de la línea que mejor nos lleve a nuestro destino. Aquí está toda la información referente a cada una de ellas así como los diferentes planos. Nosotros nos sacamos la metro card en función de los días que íbamos a estar allí y fuimos recargando sobre la marcha. 

En fin, la flota de autobuses funciona también fenomenal pero, sobre todo, se recomienda andar mucho, que para eso es una ciudad maravillosa.