Movie Review…por César del Campo de Acuña
País: Estados Unidos.
Año: 2003.
Duración: 138 minutos.
Género: Ciencia ficción. Acción.
Guion: The Wachowski Brothers.
Reparto: Keanu Reeves, Laurence Fishburne, Carrie-Anne Moss, Hugo Weaving, Harold Perrineau, Jada Pinkett-Smith, Anthony Zerbe, Lambert Wilson, Monica Bellucci, Harry Lennix, Helmut Bakaitis, Gloria Foster, Daniel Bernhardt, Randall Duk Kim, Nona Gaye, Collin Chou, Clayton Watson, Steve Bastoni e Ian Bliss.
Música: Don Davis.
Fotografía: Bill Pope.
Montaje: Zach Staenberg.
Dirección artística: Hugh Bateup y Nanci Noblett.
Diseño de producción: Owen Paterson.
Estreno en Estados Unidos: 15 de mayo de 2003.
Estreno en España: 23 de mayo de 2003.
Reload before the revolution begins
Tras el colosal éxito, tanto de crítica como de público, de The Matrix estaba claro que Warner no iba a desaprovechar el tirón comercial de la franquicia ideada por los, por aquel entonces, Hermanos Wachowski. Viendo el potencial, el estudio pasó de invertir 63 millones de dólares a 300 en la que sería la secuela, contada en dos partes, de la cinta de 1999. No fue la primera de las películas episódicas (en 2001 Peter Jackson había estrenado El señor de los anillos: La comunidad del anillo, por lo que se esperaban films no independientes de sus predecesores hasta 2003) pero si era un concepto lo suficientemente novedoso como para generar cierta expectación y un nutrido grupo de cejas arqueadas en gesto de desaprobación. Los Wachowski pensaron que la nueva trama era demasiado extensa, rica, compleja y espectacular como para ser comprimida en solo un largometraje por lo que idearon una nueva trilogía para contar el viaje del elegido. Partiendo de The Animatrix (antología de cortos de animación que sirvió como precuela y nexo de unión de la primera con la segunda y tercera en la que se hizo un original ejercicio de transmedia) se gestaron Matrix Reloaded y Matrix Revolutions.
Matrix Reloaded (primero de los tres films estrenados sobre The Matrix en 2003) nos cuenta el primer capítulo de la que será la batalla final entre los rebeldes de Sión y las maquinas. Estas últimas asaltaran la última ciudad humana en menos de 72 horas con un poderoso ejército compuesto por 250.000 centinelas. Para evitar el ataque Neo tendrá que entrar en la fuente de Matrix pero si lo hace, el sueño recurrente que le atormenta cada noche en el que ve morir a Trinity se cumplirá. Pero para poder entrar en la fuente tendrá que encontrar antes al Creador de llaves, el cual se encuentra en poder de Merovingio, un poderoso programa de Matrix que no lo dejara libre tan fácilmente. Por otro lado, El Agente Smith, libre del control de Matrix gracias a ser destruido por Neo, ha adquirido la capacidad de hackear/infectar no solo a cualquier avatar o software en Matrix, sino a los propios humanos por lo que se convierte en el enemigo más letal del elegido en los dos planos de existencia. A grandes rasgos, y como digo siempre, esa es la compleja, y un tanto enrevesada, trama de la primera parte de la secuela de Matrix.
Bien dicho todo esto debo señalar que, aunque en 2003 mi fiebre por la franquicia estaba herida de muerte, disfrute mucho de Matrix Reloaded. Desde entonces no la había vuelto a ver y tras volverme a enfrentarme a sus, por momentos, densísimos 138 minutos de metraje vuelvo a coincidir con mi yo del pasado. Sí, es cierto que tiene momentos vergonzosos como la rave en Sion o la charleta entre Neo y el miembro del consejo y que la rebuscada trama de Los Wachowski coincide en varios lugares comunes para los aficionados a la ciencia ficción (el elegido, la rebelión, el creador de llaves…) pero la capacidad que este film posee para dejar boquiabierto al público sigue rindiendo a un gran nivel. No negare que me disgusta el abuso del CGI pero el de esta cinta (salvo algunas partes de The Burly Brawl) ha envejecido realmente bien siendo la larguísima y espectacular escena de la autopista el mejor ejemplo de ello. Por otro lado es cierto que no hay un gran desarrollo en los personajes que ya conocíamos y los nuevos, salvo Seraph y los gemelos, tampoco terminan de decirnos nada pero Matrix Reloaded es más un film de acción y concepto que de figuras concretas.
Personalmente creo que la tibia opinión que recibió por parte de público y crítica la secuela de Matrix no se debió en absoluto a que el film no cumpliera lo que prometía sino a una cuestión de tiempo. Aproximadamente cuatro años entre la primera cinta y la primera parte de las secuelas era demasiado para los albores del siglo XXI y más cuando aún no se había aceptado el concepto de los largometrajes por entregas. Pero quizás el daño más grave que le hizo el tiempo no fue la impaciencia por parte de los seguidores de Matrix, sino como el concepto se agotó gracias a las parodias. Hasta 20 películas diferentes parodiaron de algún modo u forma los efectos especiales vistos en la producción estrenada en 1999 y eso, a mi juicio, le paso factura al nuevo arco argumental presentado en 2003. Creo que esa incapacidad para poder tomarnos en serio las secuelas a raíz de todas las obras que ridiculizaron a la original impido que el público recibiera con el mismo la nueva aventura de Neo y el resto de tripulantes de la Nebuchadnezzar. Debo ser de los pocos que defienden las dos estrenadas en 2003 dado a que, intentando aislarme de las parodias, como cintas de acción y ciencia ficción (por manidos que estén los conceptos usados en ellas) son entretenidas y que quieren que les diga, es lo poco que le pido a una película ya que, como dijo el sargento de artillería Highway en El Sargento de hierro: “Me puedes robar, me puedes matar de hambre, me puedes dar de hostias, me puedes hasta mear pero no me aburras “.
Curiosidades:
- Alrededor del 97% de los materiales de los sets de películas fueron reciclados después de haber terminado El rodaje.
- Sean Connery fue seleccionado para interpretar al arquitecto, pero rechazó el papel porque no entendía el concepto de la película. Connery menciona esto en una entrevista en el DVD La liga de los hombres extraordinarios (2003).
- La secuencia de persecución de la película se tardó casi tres meses en filmar (más tiempo que en el rodaje de algunas películas). GM (General Motors) donó 300 coches para su uso en la producción de la película. Los 300 estaban destrozados una vez concluyo el rodaje.
- El papel de Seraph fue escrito específicamente para Jet Li. Pero, al parecer, Jet Li pidió la misma cantidad de dinero que Keanu Reeves para hacer la película. El personaje fue convertido entonces a una mujer y se le ofreció a Michelle Yeoh, que lo rechazó debido a conflictos con su agenda.
- Durante el rodaje varios de los actores se lesionaron; Carrie-Anne Moss se rompió la pierna, Laurence Fishburne se fracturo un brazo y Hugo Weaving termino con una hernia de Disco Cervical.
- Los efectos especiales costaron 100 millones de dólares. Uno de los sets en los que más dinero se gasto fue en la colosal autopista de tres carriles que fue construida en la Base de la Marina en Alameda Point. Tras el rodaje el set fue destruido y reciclado.
- En la rave en Zion participaron más de 1000 extras.
- El entrenamiento de artes marciales para los actores principales comenzó en noviembre de 2000 y duró ocho meses.
- La preproducción de las dos películas duró un año, el rodaje se alargó durante un año y luego ambas películas pasaron un año en postproducción.
- Durante la Burly Brawl, hay cuatro secuencias totalmente animadas por ordenador en la que no interviene ningún actor.
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