El primer caso fue el del SOS 4.8 murciano, que amaneció el sábado, tras la celebración de la primera larga jornada del viernes, con el fallecimiento de un chaval de 26 años que se había arrojado al río Segura en las inmediaciones del recinto de La Fica, donde tienen lugar los conciertos. Según fuentes policiales, al caer al agua se golpeó en la cabeza, lo cual terminó provocado su muerto por ahogamiento.
El caso del Viña Rock es diferente, aunque igualmente no achacable al festival, pues la víctima es un chaval de 25 años que entró en parada cardiorrespiratoria durante la actuación de Ska-P en la madrugada del sábado al domingo. Fue estabilizado por los médicos del festival y trasladado al Hospital de Villarrobledo, donde finalmente murió horas después. La autopsia aclarará los motivos del fallecimiento.
Tristes noticias.
Descansen en paz.
[Imagen obtenida del Facebook oficial del Viña Rock]