Así que, puestos a morir, preferiría que fuera por alguna razón que no obligara a nuestras autoridades a visitarme moribundo en algún hospital, ni aislar a toda mi familia y amigos por estrecharme la mano, ni sacrificar al gato que pasa de mí en mi propia casa, mostrándome su absoluta indiferencia. No me gustaría causar más preocupaciones a un Gobierno que tanto se interesa por mí que me restringe, en vida cuando los necesito, servicios y prestaciones públicas, a pesar de saquearme los bolsillos a base de impuestos y tasas. Permitidme, al menos, morir sin ninguna prioridad, procurando no importar otra infección a nuestro país que pueda matarme con esa prioridad de sus preocupaciones. Os lo suplico como enfermero de hospital y ciudadano de a pie. Ya me cuidaré yo solito.
Así que, puestos a morir, preferiría que fuera por alguna razón que no obligara a nuestras autoridades a visitarme moribundo en algún hospital, ni aislar a toda mi familia y amigos por estrecharme la mano, ni sacrificar al gato que pasa de mí en mi propia casa, mostrándome su absoluta indiferencia. No me gustaría causar más preocupaciones a un Gobierno que tanto se interesa por mí que me restringe, en vida cuando los necesito, servicios y prestaciones públicas, a pesar de saquearme los bolsillos a base de impuestos y tasas. Permitidme, al menos, morir sin ninguna prioridad, procurando no importar otra infección a nuestro país que pueda matarme con esa prioridad de sus preocupaciones. Os lo suplico como enfermero de hospital y ciudadano de a pie. Ya me cuidaré yo solito.