A ver, pregunta de premio: ¿cuál es la diferencia entre un
muffin y una
madalena? Pues fundamentalmente, que la
madalena siempre es dulce,se elabora con
aceite en lugar de
mantequilla, no se acostumbra a mezclar otros ingredientes en la masa (como
frutos secos,
chocolate...) y la masa se bate mucho más para incorporar aire, lo que da como resultado un
bizcocho mucho más esponjoso.Ah, claro, y es de origen francés. Los
muffins vienen de Norteamérica, son más grasos ya que suelen elaborarse con mantequilla, admiten todo tipo de añadidos a la masa, que se bate mucho menos, con el resultado de un
bizcocho más compacto y pueden ser dulces o salados... Para los puristas, que también los hay en este asunto, claro que sí, nunca deben confundirse unos con otras (y no hablemos ya de los cupckaes...) Así que cuando me he puesto a hacer estos riquísimos, os lo aseguro, minibizcochos (que es lo que en el fondo son tanto madalenas como muffins)me he dado cuenta de que en realidad no eran ni una cosa ni otra sino una especie de híbrido. Me explico: las proporciones de los ingredientes, y los propios ingredientes, estaban más
en la línea muffin. Pero he usado aceite en lugar de mantequilla y he batido mucho la masa para conseguir un bizcocho esponjoso, que es como a mí me gusta. El resultado es... pues eso: una riquísima
muffilena.
(Recuerde: no hay que abrir el horno al menos durante los primeros treinta minutos para que la masa no se baje.)
Ingredientes (salen entre doce y catorce unidades) 250 gr de harina40 gr de queso emmental rallado40 gr de queso goudda rallado40 gr de queso cheddar rallado40 gr de queso mozzarella rallado250 ml de leche evaporada2 huevos90 ml de aceite de girasol2 cucharadas de cebollino picado1 sobre de levadura tipo Royal1/2 cucharadita de bicarbonato
Una taza de copos de avena Sal
- Precalentamos el horno a 180º.
- Tamizamos en un cuenco la harina mezclada con la levadura, el bicarbonato y un poco de sal.
- En otro cuenco batimos los huevos, añadimos la leche y el aceite y mezclamos bien.
- Vertemos esta mezcla sobre la harina, removiendo para incorporar bien todos los ingredientes.
- Añadimos los quesos y el cebollino picado y mezclamos bien.
- Ahora, con unas varillas, batimos toda la mezcla hasta conseguir una masa fluida y bien aireada.
- Rellenamos con esta mezcla los dos tercios de unos moldes del tipo de que dispongamos (de papel, de aluminio, de silicona...) y espolvoreamos por encima con los copos de avena.
- Llevamos al horno hasta que estén cocidos: dependiendo de cada horno, ya se sabe, entre treinta y cuarenta minutos. Comprobamos con un pincho, y cuando salga limpio es que ya están.
- Dejamos enfriar, desmoldamos si queremos y disfrutamos de nuestras muffilenas.