Realmente, aunque su temporada va de fines de primavera a fines del verano y los arándanos frescos están en pleno apogeo durante julio y agosto, yo los vi el sábado y los compré, a pesar de ser tempranos.Después de meses buscándolos, los conseguí y esa era la señal que yo estaba esperando para volver a hacer Muffins!!
Vaaale! Hola, me llamo Lucia y soy Muffin-adicta, ya lo he dicho, por algo se empieza…pero lo siento, no quiero dejarlos, puedo confesar que tengo un problema con ellos, pero es que están tan buenos y estos además me recuerdan tanto a mis preferidos de Starbucks…los Muffins Fresa y chocolate blanco…que no creo que vaya a poder contenerme, lo siento…
Estos además ya había prometido hacerlos cuando os enseñé la receta de Chocolate Chunk Muffins ...así que, tengo excusa, estos no cuentan y por lo tanto no engordan…(o a lo mejor esto último no lo puedo evitar, pero os aseguro que merece la pena).
Ingredientes para 12 Muffins:
- 360 gr de harina.
- 370 gr de azúcar moreno (o blanquilla, pero es que a mí me gustan muy acaramelados).
- 1 cucharadita de sal.
- 1 ½ cucharaditas de levadura en polvo.
- ½ de bicarbonato sódico.
- 375 ml de yogurt natural.
- 1 huevo.
- ½ cucharadita de extracto de vainilla.
- 70 gr de mantequilla derretida.
- 250 gr de arándanos.
- 125 gr de chips de chocolate blanco.
Preparación:
Precalentamos el horno a 170 ºC y mientras se calienta tamizamos juntos la harina, el azúcar, la sal, la levadura y el bicarbonato para evitar que salgan grumitos.
En otro recipiente, mezclamos el huevo, la vainilla y el yogurt hasta que estén bien integrados. Y los añadimos a los ingredientes secos ya tamizados y batimos hasta que estén bien incorporados.
Agregamos la mantequilla derretida y batimos hasta que tengamos una mezcla homogénea.
Finalmente añadimos cuidadosamente los arándanos y las chips de chocolate blanco.
Consejo: si los arándanos se van siempre al fondo, báñadlos antes de incorporarlos en harina, así no se hundirán.
Repartimos la preparación en los moldes para Muffin hasta dos tercios de su altura y horneamos durante 40-45 minutos o hasta que estén dorados y al presionarlos hacia abajo vuelvan a su posición inicial.
Finalmente, aguantamos las ganas de comernos unos Muffins calentitos y recién hechos, (o no) y los dejamos reposar en la placa unos minutos antes de dejarlos enfriar por completamente sobre una rejilla metálica.
Espero que os haya gustado, que os sea útil y que la probéis. Y si lo hacéis contádmelo, por favor, aquí en los comentarios, en facebook, en twitter o como más os guste. Y si tenéis cualquier duda contactadme por mail. Tenéis todos los enlaces arriba.
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