En el trabajo estamos hasta arriba, así que como no tenía mucho tiempo al final he utilizado la masa base, la normalita que aprendí cuando los preparé por primera vez, muy sencilla y que queda riquísima para acompañar a un buen cola-cao o café en el desayuno ;). Además, con el toque amargo del chocolate sin azúcar han quedado un poquito menos dulce de lo habitual y me han encantado por que, aunque por las mañanas me suele apetecer más la comer cosas dulces, tienen que tener el punto justo para que no me empalague, y estos lo tienen.
Creo que, aunque se ve bastante bien el dibujo, elegí una receta poco idónea para probar esto por primera vez... Una masa con grumos y un moldecito pequeño no es una buena combinación jeje y si a eso le sumamos mi pulso (como dice una compi, "ideal" para robar panderetas) os podéis imaginar la que lié con las cucharillas medidoras que usé para rellenar los moldecitos jaja.
Menos mal que la suerte del principiante suele acompañarme muchas veces por que, una vez más, los he preparado al límite y no tenía tiempo para hacerlos por segunda vez... Así que si os decidís a preparar esta técnica tan vistosa, os recomiendo que uséis una receta de bizcocho, etc. y una manga pastelera, seguro que será mucho más fácil.
Y antes de pasar a la receta, quiero enviar muchos besos y un gran tirón de orejas a mi madre por que hoy ¡ES SU CUMPLEEEEEE! Estoy segura de que estos muffins te habrían gustado muchísimo, así que van dedicados para ti ;). Ingredientes (para 14 unidades)
- 250 gr. de harina
- 110 gr. de azúcar
- 240 ml. de leche
- 60 ml. de aceite de girasol
- 1 huevo
- 3 cucharadas pequeñas de levadura
- 2 cucharadas soperas de cacao en polvo sin azúcar
- 1/4 cuchadarita de sal
Pon a precalentar el horno a 190ºC y prepara los moldes o papelitos que vayas a usar.En un bol mezcla los ingredientes líquidos (el huevo, la leche y el aceite) y otro los sólidos, menos el chocolate (la sal, la harina, el azúcar y la levadura).
Vierte los ingredientes sólidos en el recipientes de los líquidos y mezcla todo con movimientos envolventes sin llegar a batir. Esta masa debe quedar con grumos, ya que eso será lo que luego le de la consistencia del muffin.
Divide la masa en dos y añade el chocolate a una de ellas.
Puedes utilizar unas cucharas o una manga pastelera, como mejor te vaya, aunque si usas lo segundo recuerda que deberá tener un agujero amplio ya que la masa de los muffins tiene grumos.
Empieza poniendo una cucharada de masa en el centro del molde...
Una vez hechas déjalas reposar sobre la bandeja del horno 5 min. Puedes servirlas calientes o dejarlas que se enfríen sobre la rejilla.
No quería acabar sin daros muchísimas gracias a todos por los comentarios que estáis dejando en el post del sorteo ¡sois geniales! Ojalá pudiera premiaros a todos por lo majetes que sois!! Y también dar la bienvenida a todos los que os habéis unido durante estos últimos días, ya somos una pedazo familia ;).