En breve llegará el 8 de marzo, fecha señalada en el calendario como el día de la mujer trabajadora. Merecido homenaje a todas ellas, que en muchos casos trabajan en precario y con peores condiciones que sus compañeros masculinos.
En pleno siglo XXI, todavía quedan muchísimos lugares en el planeta, en la que su labor sigue siendo la de cuidar de su hogar y alimentar a los miembros de su familia, sin recibir ninguna compensación económica, aparte de la de sobrevivir, a cambio, sin que se les permita acceder al mercado laboral, desarrollar plenamente su vida en absoluta libertad.
No vamos a hablar de su origen, envuelto en halo de tragedia, hoy vamos a repasar la historia de la ecología a través de cinco mujeres, trabajadoras y ecologistas, que decidieron trabajar por la conservación y divulgación de los valores naturistas y de respeto al medioambiente y que en algunos casos, lo dieron todo por ello, incluida su propia vida.
Dian Fossey, mujer trabajadora y ecologista. Mártir de la conservación ambiental
Dían Fosey, 16 de enero de 1932/ 26 de diciembre de 1985. Mundialmente conocida, esta zoóloga estadounidense es reconocida por su trabajo con los gorilas de Ruanda, cuya meticulosidad en el estudio de sus costumbres y comportamientos le llevo a ser aceptada por varios grupos de gorilas como un miembro más, con los que convivió hasta su muerte, a manos de un grupo de cazadores furtivos, que acabaron con su vida a machetazos. Inmortal, su trabajo ha sido difundido por National Geographic, quien la patrocinaba en sus investigaciones. Su figura se hizo mundialmente conocida gracias a la estupenda película Gorilas en la niebla (1988) dirigida por Michael Apted y protagonizada por Sigourney Weaver.
En su diario escribió antes de morir:
“Cuando te das cuenta del valor de la vida, uno se preocupa menos por discutir sobre el pasado, y se concentra más en la conservación para el futuro.”
Rachel Carson, sentó las bases del moderno ecologismo
Rachel Carson, 27 de mayo de 1907/ 14 de abril de 1964. Precursora de la moderna conciencia ambiental e impulsora de los primeros movimientos ecologistas, esta científica e investigadora estadounidense comenzó a desarrollar sus preocupaciones medioambientales al observar los efectos negativos que tenían los pesticidas (DDT) sobre la fauna y que recogió en su obra más influyente Primavera silenciosa, en la introdujo la para entonces novedosa idea de que la naturaleza es un todo complejo, cuyas partes están intrincadamente relacionadas, y que las consecuencias indirectas de cualquier acción, también para la salud humana, son difíciles de predecir y deben ser vigiladas . Sus ideas fueron recibidas con fuertes críticas en contra sobre todo procedentes de los lobbies industriales que la llegaron a tildar de comunista. Pese a todo, sus ideas calaron fuerte, suponiendo la base del moderno ecologismo. Solo su prematura muerte le impidió ver como el cambio que proponía iba a formar parte nuestra sociedad.
“Sentí que tenía una obligación solemne de hacer lo que pudiera”
Julia Butterfly Hill, activista ecologista que paso dos años de su vida viviendo en un árbol para proteger el busque
Julia Butterfly Hill, nacida el 18 de febrero de 1974, su nombre real es Julia Lorraine Hill. Esta activista norteamericana es mundialmente conocida y reconocida por su lucha tenaz en pro del medioambiente y de la objeción fiscal (Tax resistence). Es una de nuestras musas, lo reconocemos. Salto a la palestra mundial tras permanecer 738 días (entre 10 de diciembre 1997 y 18 de diciembre de 1999) viviendo en una secuoya, Luna, de más 1500 años de antigüedad y 55 metros de altura, como forma de protesta contra la compañía Pacific Lumber que pretendía talar el ancestral bosque Redwood sito en California. Su experiencia estuvo llena de peripecias, tuvo que superar varias enfermedades y apunto estuvo de caer en más de una ocasión por culpa delas tormentas. Cuando al final descendía ella consiguió su objetivo de preservar el bosque En este enlace os cuentan todas sus peripecias. Actualmente ha escrito varios libros y se dedica a dar conferencias de carácter conservacionista y medioambiental, y sigue en el activismo participando en varias campañas para proteger selvas y bosques por el mundo. Todo el dinero que recauda lo emplea en su fundación Circle of life
“ese día me di cuenta que las arañas son parte integral del bosque, y que tienen un propósito más importante que el mío para estar aquí. En ese momento dejaron de “molestarme”
Vandana Shiva, una de las grandes precursoras del ecofeminismo
Vandana Shiva, 5 de noviembre de 1952, esta escritora, filosofa y científica India, es una de los mayores representantes de lo que se ha venido en llamar ecofeminismo. Premio Nobel Alternativo en 1993 participo en el Movimiento Chipko en los Himalayas de Garhwal, caracterizado por establecer una relación entre las mujeres y el medioambiente fuertemente influenciado por las enseñanzas de Gandhi, que se oponía a los intereses comerciales de las grandes industrias madereras.
Sus preceptos ecofeministas se resumen en tres puntos:
- La Tierra está viva, es sagrada y es la conexión entre todos los seres vivos.
- La naturaleza fue reemplazada por el patriarcado, y las mujeres, parte de la naturaleza, se encuentran subordinadas frente al hombre y a la producción.
- Respeto a todo ser viviente. Para desarrollar esta tesis planteó varias ideas, como construir otros tipos de instrumentos, más allá del Producto Interior Bruto (PIB), que evidencien la mejora en el desarrollo de las poblaciones, y el tener derechos con responsabilidad.
Vandana Shiva ha luchado para cambiar las prácticas y paradigmas de la agricultura y la comida. Entre las áreas en las que Shiva ha contribuido intelectualmente y a través de campañas activistas, se encuentran los derechos de propiedad intelectual, biodiversidad, biotecnología, bioética e ingeniería genética.
La revista Time identificó a Shiva como una “heroína” ambiental en 2003. Actualmente es una de las culpables de que Bután se convierta en el primer país del mundo que se declare orgánico, trabajando estrechamente con el gobierno de Bután en su transformación.
“La crisis del agua viene porque hemos violado los límites de la naturaleza, no hemos dejado tiempo para que recicle su agua y la limpie”
Wangari Maathai, activista ecologista africana y premio nobel de la paz
Wangari Maathai, 1 de abril de 1940 - 25 de septiembre de 2011, esta activista política y ecologista Keniata, fue galardonada en 2004 con elPremio Nobel de la Paz por «sus contribuciones al desarrollo sostenible, a la democracia y a la paz» En el año 1977 fundo el movimiento cinturón verde, el cual se encargó de plantar más de 30 millones de árboles por todo el país para evitar la erosión de los suelos de la que dependían en gran medida muchas mujeres del país para obtener alimentos para su propia supervivencia. A partir de este suceso se la conoció como “Tree Woman”. Varias veces encarcelada y atacada por los regímenes dictatoriales de su país nunca se rindió y así en 1989 se convirtió en una heroína medioambiental al paralizar, prácticamente sin ayuda de nadie, la construcción de un complejo urbanístico en el Parque Uhuru de Nairobi, que planeaba e dictador de su país. Posteriormente formo parte del gobierno democrático que sucedió al régimen dictatorial, ocupando varios puestos de máxima responsabilidad.
“ Mi espíritu, la esencia de mi trabajo, está también contenida en el símbolo de un árbol.”