Murió Bob Anderson, espadachín cinéfilo entre las sombras

Publicado el 04 enero 2012 por Queplanetageneroso

Dentro del cine hay quienes dan un toque personal, que pasa a convertirse en algo absolutamente simbólico y fundamental pero que, por esas vueltas de la vida, nunca son relacionadas popularmente a un nombre. Quedan como eso, símbolos y ya. Pero cuando esos nombres mueren, pasan a ser conocidos y todo es puesto en perspectiva. El primero de enero murió Bob Anderson, un hasta ahora “perfecto desconocido” para el público, pero fuertemente ligado a Star Wars y todo su batallón de revoluciones técnicas cinematográficas.

Claro que había quienes sabían que en Empire Strikes Back no había sido el actor David Prowse quien se calzó el traje de Darth Vader para cortarle la mano a Luke, sino el experto espadachín que estaba a cargo de las coreografías. La enorme estatura de Prowse y su poca maña para las escenas más complicadas de esgrima, le permitieron a Anderson formar parte del climax de la mejor película de Star Wars, en el momento mismo en que el jedi interpretado por Mark Hamill era amputado y llegaba la revelación más importante de la saga.

Pero la carrera de Bob es mucho más que unos breves aunque intensos segundos bajo la máscara del lord sith. Nació en 1922 y fue campeón olímpico de esgrima en representación de su Inglaterra natal. Durante décadas fue el cerebro detrás de los entrenamientos más exigentes del cine en materia de espadas. Participó de películas como Highlander, The Princess Bride, The Lord of The Rings y Died Another Day. Llegó a participar en la pre producción de la primera película de The Hobbit, a estrenarse en el transcurso de este año. Esa fue su última colaboración, con nada menos que 89 años y una vida dedicada a que los combates en pantalla fueran épicos en todo el sentido de la palabra.

También tuvo sus apariciones y cameos. En la misma Empire Strikes Back fue un oficial durante la batalla de Hoth y en el serial “The Enemy of the World” de la excepcional serie Doctor Who también tuvo una participación frente a cámaras. Su inmensa filmografía se completa con haber participado en la producción de Los Tres Mosqueteros, La Máscara del Zorro y Piratas del Caribe.

Es posible que el 90 % de las espadas de Hollywood hayan llevado su nombre y son ciertos los actores y celebridades que escucharon sus clases magistrales para convertirse en diestros espadachines cuando se encendías las luces. Pero, como muchos de los que se sumaron a la maquinaria del cine, hay quienes quedaron tras las cámaras, sin que sus nombres fueran conocidos. Un caso menos extremo, pero parecido en algún punto al de Anderson, fue Irvin Kershner, director de Empire Strikes Back, cuyo rostro algunos no conocían hasta el día de su muerte, pero que sin dudas fue el alma mater, acompañado de otros como Anderson, en articular una de las más destacadas producciones de ciencia ficción moderna.

Afortunadamente, el cine hará a Bob tan inmortal como su amigo Highlander.