Murphy lo clava cuando no se toma en serio: Sobre Scream Queens

Publicado el 02 octubre 2015 por Dro @Drolope

Durante estas semanas Scream Queens, la nueva mamarrachada de Ryan Murphy, está en boca de casi todos los seriéfilos. Todos decimos que es un absoluto despropósito. Una serie absurda. Exagerada. Incluso lamentable, he llegado a leer por ahí. Pero lo cierto es que, con solo tres episodios, hemos acabado irremediablemente enganchados. Y es que Murphy, contra todo pronóstico, y tras varios experimentos fallidos, lo ha vuelto a clavar.
Podéis leer sin peligro, ¡no hay spoilers!

El flamante creador de ese esperpento del averno que fue Glee y de las temporadas de American Horror Story ya no estaba arrasando ni brillando como sí sucedió años atrás. Incluso los Emmy de este año (premios que, por otra parte, parecen ideados por cuñaos) ignoraron descaradamente la temporada de 'Freak Show'. Y no es para menos. Desde la redondísima 'Asylum', que nos regaló para la posterioridad a la genial Lana Banana Winters, Murphy no ha triunfado tanto como se hubiera esperado con sus siguientes relatos.
'Coven', donde comenzó la decadencia, fue una temporada que se vendió como "la más feminista" (algo que no acabé de entender, puesto que un reparto mayoritariamente femenino no es un concepto necesariamente feminista). Tras un comienzo prometedor, la temporada se desinfló rápidamente, entre otras cosas, por el desarrollo tan torpe e incoherente de sus personajes. Desde Glee, ya sabemos que ese es el talón de Aquiles de Murphy. Y 'Freak Show', aunque mejor y mucho más colorida que 'Coven', se sintió como más de lo mismo para muchos.

Scream Queens me daba pereza en un principio, lo admito. Pero ha resultado ser todo un soplo de aire fresco, y creo que lo ha sido porque no se ha tomado tan en serio a sí misma como 'Coven' o 'Freak Show'. Murphy ya estaba muy quemado, necesitaba tomar un giro radical en el planteamiento de su nueva apuesta, y Scream Queens, con una Emma Roberts que está en su salsa, es una deliciosa parodia de los slashers de terror que nada tiene que ver con lo visto anteriormente. Es mamarracha, es fría y es superficial, pero ya desde la primera escena es tremendamente honesta con lo que va a ser. Y, a pesar de todas estas características, no habría que pasar por alto el ingenio y la inteligencia que hay detrás de sus diálogos y de todos esos homenajes (si preferimos entenderlos como "homenajes" antes que "parodias") a los clásicos del cine de terror adolescente.
Por eso, tras mucho tiempo, vuelvo a rendirme a los pies de Murphy. Yo compro la divertidísima y maruja Scream Queens... ¿y vosotros?

Isidro López (@Drolope)