Musa. ¿Y la inspiración?

Publicado el 09 noviembre 2017 por Criticasen8mm @Criticasen8mm
Título original:
Muse
Año:
2017
Fecha de estreno:
10 de Noviembre de 2017 
Duración:
107 min
País:
España, Francia, Irlanda, Bélgica
Director:
Jaume Balagueró
Reparto:
Elliot Cowan, Ana Ularu, Manuela Vellés, Leonor Watling, Christopher Lloyd
Distribuidora:
Filmax
Jaume Balagueró vuelve a las andadas. El cineasta catalán recuperó hace tres años la franquicia [REC], que hace ya una década le permitió dejar su impronta en el género de terror. Desde aquel 2007, la carrera de Balagueró repuntó con Mientras duermes, fascinante thriller estrenado en 2011, para después caer en un letargo del que no se espera que despierte de nuevo. De hecho, el propio realizador no da muestras de querer recuperar las cotas de originalidad que le llevaron a la cumbre de su género predilecto. En ese sentido, Musa, su nueva película, no es una excepción.


Esta coproducción a cuatro bandas es un abigarrado cóctel de fantasía, temores y encrucijadas emocionales, lo que viene a ser el esqueleto de cualquier filme de terror. El protagonista de la cinta es un profesor que acaba de publicar su primera novela, y que tras un evento traumático se introduce en una fantasmagórica vorágine de espíritus y metáforas andantes. Junto a otra chica, tendrá que desentrañar el misterio de las “musas”, seres etéreos para la mayoría de los vivos, que han atormentado a los creadores durante toda la historia de la humanidad. Un punto de partida digno de las inverosímiles peripecias del profesor Langdon, que acaba derivando en un distorsionado recuerdo que puede evocar a producciones tan fatídicas como Los crímenes de Oxford.

Musa carece de una personalidad definida, aunque su reparto ponga pleno empeño para que el pulso de la película no se detenga. A pesar de ese esfuerzo, acabamos viendo más de lo mismo, otra gota de lluvia que no tardará en evaporarse, un grano de arena que no se distinguirá del resto de componentes de un género que rara vez nos sorprende con algo nuevo, aunque sea uno de los más propensos al factor sorpresa. A una distancia sideral nos encontramos con títulos como Crudo, Déjame salir o It, que son paradigmas recientes de cómo revitalizar el thriller psicológico, una labor de la que Balagueró se ha desentendido por el momento.
3/10