Museo del Ejército (España), museo español ubicado en Toledo tras su traslado desde la ciudad de Madrid a comienzos del siglo XXI.
2 HISTORIA
Cuando en 1502 se estableció la comunidad de jerónimos en el Real Monasterio de ese nombre, construido por los Reyes Católicos, se edificó junto a la iglesia un “Cuarto” para hospedaje de los monarcas. Allí solía retirarse Felipe II y de ahí le vino el nombre de Retiro Real o Buen Retiro. Para festejar en 1632 el nacimiento del príncipe Fernando, hijo de la hermana del rey, el conde-duque de Olivares terminó en ese lugar la construcción de un palacio con destino a Felipe IV. La parte noble del Palacio del Buen Retiro es el Salón Central, decorado por Diego de Silva Velázquez y llamado “de Reinos” porque en su techo figuran los escudos de todos los que formaban la Corona de España. Allí se celebraron Cortes durante los reinados de los últimos Austrias y primeros Borbones. En la última se derogó la Ley Sálica, instituida en España por Felipe V y que excluía del trono a las mujeres. El Palacio fue residencia de los reyes hasta que Carlos III se instaló en el de la plaza de Oriente, una vez concluido. En julio de 1841 un decreto del general Baldomero Fernández Espartero, regente del reino, ordenó el traslado del Museo de Artillería desde el Palacio de Buenavista a los salones del Palacio Real del Buen Retiro. En 1932 se incorporaron a este Museo otros de Ingenieros, Caballería e Infantería, para constituir el que es hoy del Ejército. Hoy, cerradas las dependencias madrileñas, se ultima el traslado y ampliación de su patrimonio al Alcázar de Toledo (edificio que también alberga la Biblioteca de Castilla-La Mancha).3 COLECCIÓN
Distribuidos en 22 salas, alberga unos 30.000 objetos de incalculable valor artístico, cuadros, armas, tapices, recuerdos y documentos de figuras históricas, como las cartas a Horatio Nelson, Francisco Javier Castaños, José de Rebolledo Palafox y el duque de Wellington, una cédula extendida por los Reyes Católicos, tres tomos del Código de las Siete Partidas de Alfonso X el Sabio y diferentes manuscritos.En las salas de la Planta de Infantería cabe mencionar: un fragmento de la bandera de la batalla de Lepanto; la famosa espada Tizona de El Cid, que data del siglo IX y fue luego propiedad de Isabel I la Católica; y la colección de armaduras de la Casa de Medinaceli, en la que figuran dos “medias armaduras” de Gonzalo Fernández de Córdoba (el Gran Capitán) cuando era paje. La Sala de Caballería contiene maniquíes con uniformes de diversas épocas y colecciones de sables de casi todos los países.Se exhiben asimismo tapices como el de la Santa Hermandad de Toledo, la bandera tomada a los ingleses en la conquista de Pensacola y la del navío San Juan Nepomuceno del heroico Cosme Damián Churruca. En la Sala Árabe, decorada según el estilo de la Alhambra, se conservan espadas y prendas de Boabdil y la espada de Aliatar, su suegro, con la que murió combatiendo en la batalla de Iznájar.En la Sala de Ultramar, de la Planta de Ingenieros, se pueden contemplar: un trozo del árbol bajo el cual lloró Hernán Cortés en la Noche Triste; un fragmento de la cruz que portaba Cristóbal Colón cuando pisó por vez primera el Nuevo Mundo; restos de ropas de Francisco Pizarro; el anverso y reverso del estandarte que llevó en la conquista del Perú; armaduras orientales, japonesas, ídolos, armas y diversos objetos de China, Cochinchina y Filipinas.En otras salas hay recuerdos históricos de la guerra de la Independencia española, junto a cuadros, uniformes, banderas, documentos y cañones tomados al Ejército francés. También se exponen la tienda de campaña que usó en Túnez Carlos I y aquella en donde se firmó la paz de la guerra de África en 1860, así como maquetas de importantes fortificaciones, puentes o batallas.En la Planta de Artillería es posible contemplar la evolución de esta arma, estructurada en las siguientes épocas, desde el descubrimiento de la pólvora hasta el primer cuarto del siglo XX:Primera. Artillería de hierro forjado, siglos XIV y XV y primer cuarto del XVI. Pieza característica, la bombarda.Segunda. Artillería de hierro forjado y colado, siglos XVI y XVIII. Aparece el bronce. Piezas características, la culebrina y el cañón.Tercera. Artillería de bronce, también llamada de ordenanza, siglo XVIII y primera mitad del XIX. También se emplea el hierro. Pieza característica, el cañón.Cuarta. Artillería de acero, rayada y de retrocarga, segunda mitad del siglo XIX y primer cuarto del XX. Pieza característica, el cañón. Aparecen el moderno obús y la ametralladora en las unidades de maniobra.La Sala de Miniaturas contiene figuras de soldados de épocas antiguas, egipcios, griegos, romanos, árabes y de la edad media, así como figuras de destacadas personalidades españolas y extranjeras, y distintas formaciones de unidades europeas de distintos periodos. Hay también un completo muestrario de uniformes españoles desde los tiempos primitivos hasta el primer cuarto del siglo XX. En la terraza exterior se exhiben piezas de artillería de diverso calibre.