Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú: ¿Un cierre por 2 años?

Publicado el 05 julio 2019 por Apgrafic
Sala interior del MNAAHP | © Difusión

Se encendieron las alarmas cuando se supo que se había caído parte del techo de uno de las salas de exposiciones temporales del Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú y más aún cuando el Ministerio de Cultura anunció el cierre del museo por dos años "para ejecutar prioritariamente el proyecto de Mejoramiento de los servicios de exposición permanente y almacenamiento del Patrimonio Cultural mueble histórico y artístico del emblemático museo, con miras al Bicentenario". 

Una medida que ha sido cuestionada por algunos sectores, pero que también podría ser pertinente si se dieran a conocer el plan a desarrollarse en el tiempo establecido. Conversamos con Christian Mesia, Doctor en Antropología y ex director del MNAAHP, y con Carlos Del Aguila, Director General de Museos del Ministerio de Cultura.

"Durante mi gestión se realizaron inspecciones frecuentes por parte de Defensa Civil, por lo que optamos por reemplazar íntegramente el techo de uno de los almacenes más grandes del Museo (techo que por cierto contenía asbestos), además de realizar mejoras sustantivas en la Sala Amazonía", dice Mesia. "La sala Paracas del MNAAHP se mantuvo cerrada por varios años debido a los daños causados en el techo de estadebido al sismo del año 2007. En tal razón formulamos y presentamos el PIP de renovación integral de la Sala Paracas, el cual fue exitosamente finalizado en el año 2013. Estos fueron parte de los diversos pasos renovación escalonada para el Museo, ante la ausencia de decisión política para una renovación integral".

Uno de los grandes problemas para mantener el museo de manera óptima ha sido el presupuesto, como confirma el propio Mesia: "Entiendo que la preocupación principal de todos los directores y profesionales que han pasado por el MNAAHP ha sido la de la infraestructura, y me consta el esfuerzo de muchos de ellos en lograr que se habiliten los recursos necesarios para la mejora del Museo. Cada partida presupuestal ganada a su favor ha sido un gran triunfo, por más pequeña que haya sido dicha partida, pero lamentablemente no se han contado con los recursos suficientes para una solución definitiva del problema de infraestructura del Museo".

Por su parte, Del Aguila asegura sobre esta situación: "Luego del evento producido, se realizó una evaluación por parte de la Subgerencia de Gestión de Riesgos de Desastres de la Municipalidad Distrital de Pueblo Libre, así como de personal de la Dirección de Patrimonio Cultural Inmueble del Ministerio de Cultura, determinándose que el estado de los techos constituía un riesgo por las condiciones de deterioro que presentan. Por otro lado, debido a la actualización de proyecto de inversión ‘Mejoramiento de los servicios expositivos permanentes y de almacenamiento del patrimonio cultural mueble histórico y artístico del Museo Nacional de Arqueología, Antropología e Historia del Perú, en el distrito de Pueblo Libre, provincia de Lima, departamento de Lima’, el mismo que se encuentra en su etapa de Inversión (elaboración del Expediente Técnico), era oportuno efectuar el cierre temporal de las instalaciones del museo al público visitante, hecho que de todas maneras se hubiera tenido que producir en cuanto se iniciaran las obras civiles, a razón de dicho proyecto de inversión, el cual también abarca toda la zona expositiva permanente, es decir, incluye la zona afectada. La proyección temporal que se ha planteado es hacia el Bicentenario por lo que se calcula que puedan ser dos años, hasta que no se culmine la propuesta no podemos tener un tiempo específico, en comparación con cierres temporales por renovación en otros museos del mundo es una meta corta".

Falta de trasparencia
"Mis primeras preguntas fueron, ¿por qué dos años? ¿Por qué no tres, cuatro? ¿cuáles han sido los criterios técnicos del cierre?", comenta Mesia. "La clave está en el mapa de riesgos del museo y el informe técnico basado en el mismo. Con esa información se debe de responder la siguiente pregunta: ¿qué es lo mejor para la seguridad del público y del patrimonio cultural que resguarda el Museo? Entiendo la medida de un cierre temporal a fin de realizar y/o complementar el mapa de riesgos, mientras que un cierre con plazo fijo debe de responder a dos cosas, el mapa e informe ya mencionado y un proyecto de ejecución casi inmediata. Pero ojo, que el cierre completo del Museo, por un plazo determinado no es la única opción. Mientras más transparencia exista en el porqué de las decisiones tomadas, el Ministerio de Cultura tendrá el respaldo que necesita para emprender la renovación del Museo más importante del Perú".

Del Águila informa qué es lo que se realizará durante los años de cierre: "En primer lugar, se tiene que culminar la elaboración del Expediente Técnico de Obra, el mismo que contempla una propuesta de conservación y restauración de la edificación con características monumentales, con miras a procurar devolver las condiciones originales al bien inmueble, que está declarado monumento, es parte del Ambiente Urbano Monumental de la Plaza Bolívar y se encuentra dentro de la Zona Monumental del distrito de Pueblo Libre. Un segundo momento será la ejecución, es decir, las obras civiles que se concentrarán en las áreas a intervenir (área expositiva permanente y construcción de zona de depósitos y manejo de colecciones). Finalmente, se efectuará la implementación de las salas expositivas y de los depósitos y zonas de manejo de colecciones, para lo cual se ha iniciado la elaboración del Plan Museológico del MNAAHP, que permita su reapertura durante las conmemoraciones del Bicentenario de nuestra Independencia, bajo un enfoque de modernidad y mirada al futuro".

Para Mesía, "la renovación en los museos no es algo extraña en ellos, pudiéndose tomar dos caminos, la renovación por sectores (como el Museo Pérgamo de Berlín) en donde los trabajos de mejora del edificio concluirán en el 2025, pero se mantiene el acceso a un área en particular, conforme avanzan los trabajos, se cierran salas y se abren las que permanecieron cerradas. La segunda opción es el cierre total, como lo hizo el Museo Nacional de China en el 2007, el cual cerró por tres años. El único modo de determinar si el cierre de dos años es oportuno es observando el informe de riesgos del museo. No conozco los criterios para anunciar un cierre de dos años, pero puedo intuir que, al haberse tomado la medida del cierre total, el informe de riesgos debe de ser contundente. Si el cierre tiene plazo determinado, debe de existir un proyecto ya aprobado de renovación integral que durará dos años. Sería muy importante que dicho proyecto sea presentado públicamente. De no existir un proyecto de ejecución casi inmediata, el plazo de dos años es arbitrario".

La sombra del MUNA
Uno de los grandes cuestionamientos para este cierre es que se desmantele el MNAAHP para que la colección sea trasladada al MUNA, el futuro Museo Nacional de Arqueología. Si bien es cierto, sólo el 10% de la colección del museo se encuentra actualmente en sala, no está muy claro si existe una relación entre esta situación y los trabajos en el MUNA.

Para Mesia el vínculo es innegable. Una de las premisas de las que parte es que "en el año 2013 el equipo técnico del MNAAHP y el Ministerio de Cultura elaboraron un proyecto de remodelación integral del Museo. Este proyecto desarrollado tanto a nivel de Dirección de Museo y de Viceministerio de Patrimonio Cultural e Industrias Culturales contemplaba la construcción de modernas áreas de almacenamiento, así como la implementación de modernos laboratorios de conservación y por supuesto, la renovación de la infraestructura y equipamiento museográfico. Incluso se llegaron a tener diversas reuniones en la cual se examinaron los detalles del manejo de las colecciones y almacenamiento durante el desarrollo de la obra civil. El proyecto tuvo un presupuesto aproximado de 200 millones de soles, y se encontraba en pleno desarrollo hasta su cancelación formal en el año 2014, a fin de destinar los recursos de dicho proyecto al MUNA".

Según Mesia, esta situación ha afectado anteriormente a otros museos, entre ellos el Museo Nacional Chavín, cuya implementación se vio seriamente retrasada a fin de utilizar sus recursos en el MUNA. Lo mismo sucedió con el proyecto del Museo Nacional Amazónico. "Lo que sería una completa lástima es que se utilice el cierre del MNAAHP como una excusa para llevar los tesoros y piezas del MNAHP al MUNA en un préstamo indefinido, y que los objetos no retornen al MNAAHP una vez que este reabra sus puertas. No creo que actualmente exista un complot contra el MNAAHP como algunos han opinado, lo que sí creo es en la necesidad de hacer muy transparente la información sobre el proceso de remodelación del museo y de este modo generar una corriente de opinión positiva en torno a dicha remodelación y el porqué del cierre integral versus el cierre escalonado o viceversa", concluye Mesia.

Del Águila explica sobre los trabajos en el MNAAHP: "Como parte del Plan Museológico, se pretende lograr la revalorización de las colecciones del MNAAHP, las mismas que permanecerán en el museo, y que justamente, ahora que se encuentra cerrado, todo el personal estará enfocado en las medidas de mitigación que desde hace tiempo son necesarias y se han venido postergando por diversas razones. Debemos ver este evento como una oportunidad y desde el Ministerio de Cultura se ha entendido así. Es por ello que ya se ha iniciado la reubicación de las colecciones que ocupan los espacios más vulnerables, así como el desmontaje de las salas próximas al espacio afectado. Por otro lado, se ha programado para setiembre del presente año, abrir una exposición en el Ministerio de Cultura (1er. piso de la Torre Kuelap), la misma que permanecerá durante el cierre temporal del MNAAHP".