Música entre rejas (2ª Parte)

Publicado el 18 mayo 2012 por Puchalt


 Volvemos, una semana mas, a la cárcel, para recuperar unos pocos temas cuya historia está, de una u otra manera, vinculada con la imborrable marca que deja el paso por prisión. Como ya os dije, son cientos los temas compuestos sobre prisiones y condenados, incluso discos enteros grabados por los presos, muy especial es el caso de las grabaciones realizadas a mediados de los 40 en la Mississippi State Penitentiary también conocida popularmente como prisión de Parchman, cuya feroz fama ha hecho correr ríos de tinta y notas musicales. Tantas son las historias que me voy encontrando que, tras un tiempo prudencial, en el que nos limpiemos el polvo carcelario, recuperaremos otro puñado de historias sobre presos con su correspondiente canción. De momento, completamos este primer acercamiento con tres temas bien conocidos, que practicamente no necesitan ni presentación, aún así intentaré haceros la estancia entre (musicales) rejas, lo más agradable posible...
 Posiblemente se haya convertido en la canción sobre prisiones mas famosa de la historia, fue lanzada como single en 1955 e incluida en el aclamado disco de debut de uno de los pioneros del Rock y el Country, más controvertido y extraordinario de la historia de la música, os hablo (evidentemente) de Johnny Cash, y su "Folsom Prison Blues". Durante la primera mitad de los años 50, el Rock dominaba el mercado, Jerry Lee y Little Richard golpeaban frenéticos sus pianos, Elvis contoneaba sus caderas mientras lucía su tupé engominado, se estaban creando ciertos estereotipos, entonces llegó John Ray "Johnny" Cash, un tipo llegado del Country, completamente vestido de negro, áspero, personificación de la rebeldía más absoluta, que llevaría a muchos terrenos de su vida, para cambiar para siempre los límites entre el Rock, el Country, el Rockabilly, el Gospel...y romper con cualquier etiqueta establecida anteriormente.
 En 1952 Cash cumplía con el servicio militar en una base del ejercito estadounidense en la Alemania Occidental, la tropa solía disfrutar de alguna tarde de cine en la base militar. En una de estas proyecciones, Cash, quedó muy impactado con un filme carcelario "Inside the Walls of Folsom Prison" (Crane Wilbur,1951), al terminar la proyección ya tenía una idea clara sobre la letra."I shot a man in Reno just to watch him die" (Le disparé a un hombre en Reno sólo para verlo morir), con esta impactante frase se resume la historia del hombre solitario, habitual de los trenes de carga, cuyos huesos acaban entre rejas por "un pequeño problema" con la ley. A principio de 1955, ya en Sun Records, Cash intenta distintas grabaciones de la canción, pero la cosa no funciona, finalmente decide probar con una melodía diferente. Al parecer (y aquí viene la controversia) decide utilizar una canción de Gordon Jenkins, un compositor y arreglista musical, habitual de las orquestas de Frank Sinatra, Louis Armstrong o Judy Garland, llamada "Crescent City Blues", sobre esa base musical, Cahs logra encajar a la perfección su "Folsom Prison Blues". La "colaboración" de Jenkins no se reflejó en los créditos del tema, sin embargo Cash admitiría el plagio, y tuvo que pagarle 100.000$ por derecho de autor. Pero la máxima popularidad del tema llegaría en 1968, año en el que el cantante de Arkansas dio un histórico concierto en famosa penitenciaría de Folsom, el relanzamiento del single lo llevaría a lo más alto de las listas, convirtiendolo en un clásico imprescindible, y un tema recurrente en el repertorio de Johnny Cash.

La infancia de Rubin "Huracan" Carter había estado marcada por el  alcohol, la violencia y las drogas, a los 11 años fue recluido en un reformatorio, entre peleas y abusos sexuales aprendió a sobrevivir, a base de puños y coraje. Ocho años más tarde escaparía de aquel reformatorio, se enroló en el ejercito, marginado por su color y su tartamudez, aprendió a boxear. En 1966 Rubin ya era boxeador profesional, y un serio aspirante al titulo mundial de los pesos medios. La historia cuenta que el púgil y su amigo John Artis, se fueron a tomar unas copas a un garito, al salir fueron detenidos por una patrulla policial, no hubo acusación, no hubo interrogatorio, simplemente los llevaron al calabozo. En unas pocas horas fueron acusados de un triple asesinato ocurrido en el Lafayette Grill, Paterson, Nueva Jersey. Tras un proceso lleno de irregularidades, cargado de prejuicios raciales, con declaraciones confusas, falta de evidencias y testigos de dudosa credibilidad, Rubin Carter y su amigo fueron condenados a cuatro cadenas perpetuas, os recuerdo que esto ocurrió en el año 1966. El caso tuvo una ligera repercusión mediática, se intentó "esconder" entre otras noticias, pero Rubin Carter siempre defendió su inocencia, escribió un libro sobre su historia “El Decimosexto Round” (1974), y la opinión pública comenzó a cuestionarse la inocencia de Carter. En 1975,  Robert Allen Zimmerman, mas conocido como Bob Dylan, ya era una gran estrella de reconocimiento mundial, había sido lider de la canción protesta, luego revolucionaría el folk incorporando su guitarra eléctrica, tuvo un fatal accidente de moto y se retiró a un segundo pano durante un tiempo...y en 1972 volvió a los escenarios. Al parecer Dylan visitó a Carter en prisión, impresionado por la historia de aquel que había podido ser campeón del mundo, mientras luchaba  por su inocencia tras las rejas, quiso conocer al hombre, para así escribir un tema sobre el mito y los prejuicios raciales.  "Hurricane" abrió el disco "Desire" del año 1976, y se convirtió rápidamente en la canción más popular del mismo, volvió a poner a Rubin Carter en el centro de la noticia, movilizando así a la comunidad negra, pidiendo justicia para el púgil. Pero fue un joven de 15 años, Lesra Martin, que pagó 25 centavos por el libro en 1980, quien iniciaría una reacción en cadena judicial, que desembocaría en la liberación de Carter en 1985, y la retirada de todos los cargos contra el en 1988, 22 años después de ser injustamente condenado. Esta historia está magníficamente interpretada por Denzel Washington el el film "The Hurricane" (Norman Jewison, 1999), si no la habéis visto, deberíais...

Y para finalizar este segundo acercamiento a la prisión, vamos a cerrar con el tema más emblemático, acertado y genial, sobre la dura existencia de aquellos presos que pagaban su deuda con la sociedad, trabajando encadenados limpiando los bordes de las carreteras de hierbas, cavando zanjas o incluso echando asfalto. Con esta premisa uno puede pensar que vamos a escuchar uno de esos blues profundos, cuya armónica acompaña el lamento del protagonista, nada más lejos de la realidad, por que si os digo que su autor e interprete es Sam Cooke, al momento la clase, el estiloso soul melódico y la aterciopelada voz del más grande artista de todos los tiempos, nos lleva a terrenos en el que la tristeza se puede volver una melancólica ensoñación. "Chain Gang" se lanzó como single en 1960, alcanzando el nº 2 en el top USA y el 9 en las listas británicas, consiguiendo ser el segundo mejor éxito de Cooke desde 1957 con "You Send Me". Al parecer, el origen de la canción, se debe a un encuentro real que tuvo el cantante con una de aquellas "cadena de presos", que trabajaban al borde de la carretera por la que Cooke circulaba mientras andaba de gira. Al artista de Mississippi, les dio lástima, paró el autobús de la banda, charló con ellos un rato y les regaló unos cartones de cigarrillos. Aquel encuentro inspiró uno de los mejores temas del cantante, que tuvo que repetir varias veces la grabación hasta que consiguió estar satisfecho, gracias a añadir unos coros que emulaban el sonido de los reos trabajando al unísono con el pico o la pala. Como curiosidad os recomiendo que busquéis la "canción de respuesta" que cinco meses mas tarde (y aprovechando el éxito de "Chain Gang") sacarían al mercado Ty Hunter & The Voice Masters, "I'm Free", mismo estilo, pero no es Cooke. Nosotros nos quedamos con el maestro...
That's the sound of the men working on the chain ga-a-ang That's the sound of the men working on the chain gang All day long they work so hard Till the sun is goin' down Working on the highways and byways And wearing, wearing a frown You hear them moanin' their lives away Then you hear somebody sa-ay ♪♫♪♪♫♪♪♫♪♪♫♪♪♫♪♪♫♪♪