Todo, absolutamente TODO tiene música en el mundo… y la primera que escucha nuestro bebé… es la del cuerpo, y el corazón de su mamá. Y ese ritmo suave, tibio y armonioso, activa su centro emocional. Siente, escucha y aprende. Es la mejor música para bebés con la que puede iniciar su vida.
La música genera y transmite emociones de todo tipo, lo cual es un hecho reconocido ya desde la antigüedad. En la Grecia y en la China del 500 A.C., en los tiempos de Confucio, se exaltaban sus virtudes educativas.
Los indígenas, aún usan secuencias rítmicas repetitivas para inducir ciertos estados de conciencia en ritos y ceremonias… Siempre junto a otros estímulos, visuales o táctiles, se ha utilizado para crear determinado estado anímico, en pos de un fin. La música es vibración, es vida. “El movimiento e impulso” del ser humano.
Música para bebés en el vientre materno
Durante la octava semana del embarazo, se está formando el oído de nuestro bebé, completándose a las 28 semanas de gestación. Para entonces, no sólo siente nuestras vibraciones internas, sino que ahora es capaz de oír los latidos de nuestro corazón, las voces de papá, de la familia, los ecos de los sonidos ambientales del entorno, los ecos de la música que escuchamos nosotras,… La música relajante suave lo calma, y la estridente, lo altera.
Es la primera sensación que nos conecta armónicamente con el mundo entero. El bebé, siente cercanía, afecto, empatía,… comienza a aprender, a recordar y a reaccionar ante los estímulos, comienza a desarrollar emociones.
¿Sabíais que la música y las emociones comparten la misma región del cerebro?
Con el estímulo de la lectura, se activan en el hemisferio izquierdo las áreas cerebrales responsables de la lectura y el lenguaje. Y con el de la música, se activa el hemisferio derecho, los espacios emocionales.
La emoción es garantía de aprendizaje. Ese bienestar que siente el bebé en el vientre, cuando escucha la música, es vital para su desarrollo social e intelectual, el crecimiento y su buena salud. Por ello, os invito a descubrir la infinita variedad musical que nos ofrece el mercado para motivarla.
La música para bebés, genera amor…
Nuestro bebé en el vientre, se estimula positivamente con la voz de su madre, y la música que a ella le agrada. Comparten ese vínculo íntimo, los lazos afectivos entre ambos. Incluso responde psicomotoramente al estímulo musical. Y una vez que nace, esa música acompañada ahora de palabras, besos, caricias y abrazos, refuerzan el afecto en la relación, fortaleciendo su importantísima inteligencia emocional.
La música evoca un sentimiento en el pequeño; la repetición del sonido le relaja, le reconecta con ese bienestar tibio, tranquilo, que sintió al escucharlo la vez primera. En consecuencia, los bebés que suelen escuchar música generarán una enorme cantidad de gestos y emociones… Cada expresión de amor, debería tener música.
Para que vuestro niño disfrute música relajante para bebés, os recomiendo este álbum tan especial: Música suave para relajar bebés
Canta y Cuenta con CD. Canciones para el bebé de toda la vida como “Este niño tiene sueño” o “Duérmete, mi niño”.
Nanas instrumentales para bebés… y para sus padres. Con grandes éxitos del rock español versionados para que el niño se relaje.
Beneficios de la música para bebés
- Estimula su frecuencia cardíaca. En la madre, la producción de endorfinas.
- Ayuda a estimular su oído, sus ganas de expresarse y hacerse entender, por su relación cerebral con los ritmos.
- Adquiere vocabulario, desarrollo lingüístico. La frecuencia de repetición de los sonidos, como el ritmo, lo ayuda a comprender las palabras y aprenderlas.
- Las vocalizaciones son su modo de expresarse intuitiva y espontáneamente.
- Reduce los niveles de estrés, mejora la concentración, impulsa la creatividad.
- Fomenta la confianza y la autoestima.
- Propicia el desarrollo psicomotor, mayor sentido del equilibrio y movimiento al comenzar a andar.
- Alivia trastornos de tipo psicológico.
¿Qué tipo de música para bebé es mejor?
Nuestras posibilidades de selección de música para niños son infinitas, pero nuestro bebé, será el mejor guía para esto. Siempre deberíamos incluir música clásica para bebés, especialmente la de Mozart. Cualquiera de sus sonatas, por unos minutos, dispara el rendimiento intelectual y el razonamiento espacial del niño, activando áreas cerebrales relacionadas con la coordinación motora y las emociones. El famoso llamado “Efecto Mozart”.
Como música clásica para bebés, os gustará:
El Efecto Mozart – Dulces Sueños. Para ayudar al desarrollo de la memoria y aumentar la conciencia auditiva y emocionar.
Música clásica para niños, La mejor. Lo mejor de la música clásica para niños en un recopilatorio con piezas famosas como La Marcha Radeztky o Para Elisa.
Y si preferimos atender a sus patrones de crecimiento, cada edad tiene un tipo más adecuado que otro. Varía según la intensidad y frecuencia de la música (timbres agudos o graves), los diferentes instrumentos musicales que se escuchan, las pulsaciones por minuto,… Básicamente, a nuestro bebé le gustará toda la que le induzca al placentero estado de relajación.
Si tenemos un recién nacido, podemos estimular sus sentidos con estos juguetes musicales:
Juguete musical y móvil para la cuna de Nuby. Reproduce música relajante para bebés y el volumen se puede ajustar fácilmente.
Playbees sonidos para bebés con proyector nocturno. Si detecta el llanto del pequeño, activa su música para dormir bebés.
Escuchad música relajante para niños. Cantad y jugad con vuestro hijo
No hay duda alguna de la importancia vital que tiene la música en nuestras vidas. Estamos hechos de música, vibramos, nos desarrollamos y accionamos con música, nos sanamos con la música.
Sus beneficios son infinitos: estimular o relajar, desarrollar aptitudes cognitivas y psicomotrices, divertir, aumentar la percepción, la concentración y la capacidad de memoria, etc…
La música para bebés es clave indispensable para padres y educadores en el desarrollo, la crianza y la educación de nuestro bebé. Aprovechad las melodías para bebés y música infantil, y todo lo que hagáis con vuestro niño, cantadle, bailar, jugar… hacedlo con amor… ¡y ponedle música!.
Buen día a tod@s!!