Olvidando críticas que siempre son muy distintas del auténtico e inigualable directo, me hubiera gustado que hubiesen retransmitido también las Goyescas de Granados que completaban el programa doble, en un encaje de función algo difícil de entender. Mi apuesta hubiese sido Il trittico pucciniano al completo, como debería ser "lo habitual".
Defender la música es apostar por el futuro. Disfrutarla ya es otra cosa que requiere educación, tiempo, y sobre todo querer. Desde aquí continuaremos...