Músicos de nuestro tiempo: Voro Bolón Edo, chelista

Publicado el 16 abril 2014 por Agustin @TecleaTeCrea
BCP ENTREVISTA A Voro Bolón Edo, chelista ¿Cuál es la primera experiencia que recuerdas con la música?
Escuchar música en casa, en familia, ya fuera alguna grabación que se ponía en casa, o mis padres o mi hermana tocando o estudiando. Prácticamente tengo recuerdos musicales desde que tengo memoria. ¿Qué personalidad musical crees que te influyó más en tu carrera?
En este aspecto he de resaltar más de una, desde el principio mi familia, y enseguida mis primeros profesores de violoncello, Lluïsa LLopis y Salvador Novejarque. Aunque mediante grabaciones y conciertos han sido también muchas, desde grabaciones de Rostropovich, Truls Mork, Yo Yo Ma, Kavakos, Janine Jansen o Asier Polo, con quien tengo la suerte de estudiar en este momento, así como los grandes directores, especialmente Claudio Abbado y Simon Rattle.
Pero si de estas figuras hubiera que destacar una, sería a Salvador Novejarque.
¿Cuál era el estilo o el compositor que más te gustaba estudiar de joven?
El romanticismo, en especial la música de Beethoven, Bramhs, Rachmaninov, Mahler... aunque también clásico como Mozart o Haydn. ¿En qué repertorio te sientes más a gusto en la actualidad?
He cambiado poco de preferencias, el romántico y postromántico sigue siendo mi predilección, pero he ampliado mis gustos, últimamente me resulta fascinante la música impresionista de Ravel y Debussy y también la música antigua, compositores como Purcell me parecen fascinantes. Cuéntanos, por favor, alguna experiencia o anécdota que te venga a la memoria que tenga que ver con tu instrumento (en algún curso, o concierto...)
Anécdotas siempre hay muchas, en ensayos de orquesta, de grupos de cámara. Pero si he de quedarme con algún momento que me haya marcado serían mis primeras clases con mi actual profesor Asier Polo, me resultó fascinante su manera de enseñar, de transmitir las emociones y de sacar lo máximo de cada uno, me pareció una que tenía una personalidad arrolladora, que conecta con la gente. Si te enganchas a él la música fluye, si entiendes e interiorizas sus ideas y formas de trabajar comienzas a ver y explorar todo un mundo nuevo de posibilidades.
En ensayos, viajes y conciertos también tengo muchas divertidas, especialmente con mis compañeros de trío. Somos los tres muy amigos y nos lo pasamos fenomenal tocando y viviendo experiencias juntos, es una suerte encontrar gente con la que conectas no solo musicalmente, sino en el aspecto personal.
¿Qué opinas de la situación actual de la enseñanza de la música?
En España creo está habiendo un retroceso importante, con el tema tan presente de la crisis económica, los problemas por los que están atravesando muchas familias les impide dar a sus hijos una educación completa, ya sea musical o no, que antes si podían permitirse. Si todo funcionara bien, no tendría el por qué depender del nivel económico de las familias la educación de los más jóvenes, en los grandes países europeos, la educación siempre va delante, y todo el mundo tiene oportunidades, sea del nivel que sea, en este aspecto España ha perdido en poco tiempo, todo lo que había avanzado en este aspecto ( que tampoco era demasiado...) para volver a eliminar las ayudas, el fomento a una educación completa, el fomento de la cultura. Se ha perdido lo último que debería perderse, la educación como necesidad básica para salir adelante. Y en concreto el panorama musical español, salvo algunas contadas excepciones está estancado. El problema viene desde la base, los niños deberían poder contar con profesores implicados, que fueran consecuentes con la educación, bien formados, y que pudieran transmitir a los más jóvenes los valores de la música. Si el nivel musical español resulta inferior al de otros países europeos, el problema viene desde abajo. Muchos de los profesores que adquieren una plaza de funcionario como profesores de música de conservatorio acaban por acomodarse y acaban dejando aparcada su ilusión, formación personal e implicación en lo que hacen, y esto obviamente, y más en los más pequeños, es algo que se transmite y que trae consecuencias. ¿De qué sirve tener grandes conservatorios superiores si la gente que llega a ellos no da la talla para trabajar a un alto nivel porque tienen carencias básicas? ¿Cuáles son tus músicos favoritos?
Claudio Abbado, Simon Rattle, Janine Jansen, Leonidas Kavakos, Truls Mork, Jacqueline du Pré o Asier Polo. ¿Crees que es útil conocer recursos sobre improvisación? ¿Por qué? ¿En qué medida crees que es necesaria la creatividad para el músico?
Sí. Creo que ayudan al músico a formarse y a acelerar las reacciones de lo aprendido. Ayudan a la agilidad e inmediatez y fomentan la creatividad musical.
La creatividad es algo esencial, sin creatividad las interpretaciones carecen de interés, hay que innovar y aportar siempre cosas nuevas que resulten coherentes y atractivas.
¿Qué proyectos musicales tienes en mente realizar?
De momento estudio tercero de superior en Musikene (Centro Superior de Música del País Vasco). Al terminar espero poder acceder a hacer un Máster en interpretación en alguna de las grandes escuelas Europeas o Norteamericanas. Por el momento tengo una formación de cámara seria, un trío de violín, violoncello y piano que funciona muy bien y con el cual tenemos muchos proyectos de conciertos en marcha, algo que no es fácil en estos tiempos. A nivel individual también se me presentan muchos retos constantemente. Recitales, conciertos con orquestas, masterclasses, y tengo una gran ilusión por seguir trabajando en todos ellos. De momento soy miembro de la JONDE (Joven Orquesta Nacional de España) y de la EUYO (European Union Youth Orchestra) y mi actividad orquestal es bastante grande, algo por lo que también disfruto mucho. ¿Qué consejo o recomendaciones darías a los que empiezan ahora a estudiar tu instrumento?
Paciencia, ganas y mucha ilusión y empeño en lo que hacen. La vida musical es muy exigente, pero a la vez, muy satisfactoria. ¿Quieres añadir algo más sobre tu relación con la música?
Poco más puedo decir simplemente, despedirme con una frase que creo que dice mucho de lo que significa la música al menos, para mí. Es del gran filósofo Alemán Friedrich Nietzsche (1844-1900): “La vida sin música sería un error”.