Revista Diario
En los posteos anteriores he explicado esta forma de ver la vida que he forjado, y hoy a propósito de un texto en el diario, se me ocurrió pensar en aclarar esto.No soy una inocente pacífica, no en el estricto sentido de la palabra.Y ya lo dije antes, busco y quiero ser tratada con cordialidad. Mantengo esa cordialidad también con personas a las que recién comienzo a conocer.Pero.¡Pero!Si siento que una persona me está pasando a llevar, si veo que quiere ser descortés INTENCIONADAMENTE, me defiendo altiro. Rápido. Instantáneamente.Ejerzo y potencio mis derechos, hasta devolver incluso la descortesía. Me transformo.Como hacen los perros chicos cuando ladran a un mastín. Sí, también soy menuda y pequeña, siento que tengo que defenderme para que el resto sepa que ME TIENE QUE RESPETAR.Una furiosa más. Una inocencia más.