Franky, así es como han bautizado en el Centro Zoosanitario Municipal a esta perrita que, después de mucho tiempo, han conseguido recoger.
Pese a su cortísima edad (aproximadamente 1.5 años) este pobre animal ya ha sufrido lo indecible.
Abandonada con una cuerda al cuello y muy asustada, Franky ha pasado casi un año demabulando por calles y carreteras con una soga que, paulatinamente, le iba cortando la piel del cuello.
Estaba tan asustada que ha supuesto mucho trabajo y mucho tiempo cogerla y menos mal que por fin han podido atraparla ya que hoy Franky llegaba, por primera vez, al Centro Zoosanitario Municipal con la tráquea casi seccionada. La cuerda le había cortado todo el cuello alrededor, incluso algunas personas que estaban presentes a su llegada se han mareado de ver el estado en que llegaba el pobre animal.
Le han limpiado la herida, se la han tratado y le han puesto un vendaje.
Es una perra de tamaño mediano-grande (unos 25 kgs) y con un carácter muy cariñoso, noble, dócil, amable y sumiso. Se ha dejado curar y revisar sin ningun mal gesto y, aún siendo hoy su primer día, ya movia el rabito a todos los trabajadores y ha estado comiendo salchichas.
Es una perra cariñosísima y muy sumisa y tierna. Ha sufrido muchísimo, es una perra muy agradecida y amable que merece, por fin, encontrar un buen hogar donde ser feliz.
Se entrega vacunada, desparasitada interna y externamente, identificada mediante microchip y esterilizada (tal y como establece la ley).
Contacto: [email protected]
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