Se trata de una fragancia de la familia Chipre Floral, creada por Trudi Loren de IFF. Es bien diurna, veraniega pero sin ese toque tan clásico de lo frutal o marino.
La parte superior de la botella es un corazón inspirado en los rascacielos de NYC. La parte inferior es rosa y suave.
Las notas de salida son frambuesa, pimienta rosa y gálbano. En el corazón tiene jazmín egipcio, fresia y raíz de lirio. En el fondo, las notas de pachuli, absoluto de vainilla, almizcle y ámbar gris.
Es un perfume dulce pero sin ser pesado o empalagoso. La fragancia dura mucho sobre la piel sin ser avasallante.
Hay tres presentaciones: 30ml, 50 y 100ml. No tengo el precio porque me lo regalaron, ¡se los debo para la próxima!