La altura gastronómica de NōMō, con el chef Jaime Camacho al mando de los fogones, es patente, con propuestas muy francas, basadas en productos de mercado de extraordinaria calidad y siempre con un toque sorprendente. El staff directivo lo completa Miguel Alabance como Jefe de Sala.
NōMō debuta así en lo más alto del firmamento gastronómico de Marbella, como demuestra que entre sus padrinos y fans figuren algunos de los estrellas Michelin y soles Repsol de la ciudad.
NōMō es una Brasserie en toda regla, una cervecería restaurante de ambiente relajado, con servicio de mesa profesional y menú impresos, pero con un toque informal, abierto todo el día. Un tipo de propuesta que era muy necesaria en la nueva zona del Bulevar de San Pedro Alcántara que ya se ha convertido en uno de los mayores focos de atracción turística de toda Marbella.
Óscar del Barrio es el propietario y artífice de NōMō, un profesional formado en Les Roches, con una dilatada carrera nacional e internacional, que ya triunfa desde hace más de una década con Flanker Bar, también en San Pedro Alcántara y en Pozuelo, en Madrid. El concepto de NōMō es marcadamente mediterráneo, caracterizado por la frescura, con el color blanco como dominante, con toques de verdes y azules, muy marinos. Destaca la amplitud y el equilibrio. Con la terraza al aíre libre integrada en el propio restaurante. Así como una zona de barra para comer más informalmente.
NōMō da una vuelta a tradición gastronómica
La Cocina de NōMō está dirigida por Jaime Camacho, formado en la Escuela de Hostelería y Turismo de Barcelona CETT, con un amplio periplo nacional e internacional y experiencia con los más grandes como Martín Berasategui. Es un profesional con la suficiente juventud para sorprender, 29 años, así como madurez y técnica como para alcanzar un gran nivel gastronómico. La cocina de NōMō se centra en la extraordinaria calidad de los productos, de mercado y temporada, muchos ecológicos. La preparación de los platos es muy franca y transparente, donde se reconocen los ingredientes, pero siempre con un toque de sorpresa. “Damos una vuelta a la tradición”, explica el Chef que elige personalmente el pescado en el Mercado de Marbella.
La Carta de NōMō es ajustada, muy práctica para el comensal, pero lo suficientemente larga como para fidelizar a sus clientes y ofrecerles novedades constantemente. Con dos o tres propuestas diferentes semanales y una cuidadísima Carta de vinos, con algunas de las mejores referencias, además de una estupenda cerveza natural.
En la barra de NōMō es imprescindible probar sus otras francesas Guillardeau y Marennes Olerons, que figuran entre las mejores del mundo, marinadas al estilo japonés con toques de jengibre y cilantro, así como la tortilla fondant con cebolla confitada y acompañada de presa o chorizo. La tortilla de NōMō es única y engancha.
En la Carta más formal destacan primeros platos como el ceviche de vieiras del Atlántico, muy tiernas y jugosas, con gambas rojas de Garrucha, aguacate y un toque de maracuyá. Respecto a los platos principales se puede elegir entre fantásticos pescados, carnes como presa, cordero, aves y hasta un cochinillo lechón de Segovia, preparado como terrina, con piel crujiente y una emulsión de boniato ecológico. Atención especial merecen también sus panes, artesanos, de El Colmenero y de Zapelia. Reservas en 951 702 168