Hoy os hablo de una nueva web que he conocido hace poco. Me ha encantado y estoy segura de más de una de las que me estáis leyendo le vais a sacar mucho partido igual que yo pienso hacerlo. Pero antes de hablaros de ella, dejadme que os ponga en antecedentes.
Imaginaros -yo no tengo que hacerlo- que tenéis un niño que juega al baloncesto. Lleva toda su corta vida jugando al baloncesto y el baloncesto es su pasión. Se acerca la fecha de su cumpleaños y os pide que su regalo sea unas botas "de basket" como las de Pau Gassol. Vosotras, evidentemente, le explicáis que Pau Gassol gana un pastón y se puede permitir esas botas aunque seguramente no se ha comprado unas botas de baloncesto en los últimos veinte años. Da igual, veis los ojos de vuestro hijo cuando ve las botas en Internet y claudicáis: compráis las botas confiando en que a partir de ahora vuestro hijo juegue como Gassol y no tenga que comprarse unas botas en los próximos veinte años porque las marcas se van a matar porque vuestro hijo juegue con las que ellos fabrican.
A partir de aquí se pueden dar dos casos. El primero, vuestro hijo da el siempre inoportuno estirón, el pie crece un centímetro de golpe y ponerse las botas "gassolianas" se convierte en un calvario para él. El segundo caso es cuando tu hijo llega a su nuevo colegio y descubre que algunos de sus nuevos amigos juegan al rugby y éste se convierte, a partir de ahora, en el mejor deporte del mundo que, por cierto, no se juega con botas de baloncesto.
Me habéis entendido, ¿verdad? Pues imaginaros que el estirón inoportuno se produce -y os aseguro que pasa- justo una semana después de haber comprado el pantalón largo del uniforme o que vuestra niña ha decidido que ya no quiere ser violinista sino sino bateria en un grupo de rock...
Pues bien, para que no entremos en pánico ni suframos crisis de ansiedad ante estas situaciones, nace SECOND HAND SCHOOL. Os he puesto el ejemplo del baloncesto porque quiero que os quede claro que este nuevo e-commerce no es una página más de compra del uniforme escolar de segunda mano.
La idea con la que nace esta plataforma es la de convertirse en un espacio en el que podamos vender todas esas cosas relacionada con la actividad escolar y extra-escolar que nuestros hijos ya no utilizan y, a la vez, podamos comprar a un precio más que razonable y en inmejorables condiciones lo que nuestros hijos necesitan.
En SECOND HAND SCHOOL podemos comprar y vender equipación extraescolar de segunda mano, equipación deportiva de segunda mano, instrumentos musicales de segunda mano, uniforme boarding school segunda mano, disfraces segunda mano y otras cosas que os van a encantar y de las que os voy a hablar luego...
Otra de las razones por las que me ha gustado esta web es que se encargan de la gestión integral del proceso de compraventa que empieza cuando el vendedor -osea yo- envía la información sobre el producto que quiere vender hasta que el comprador -la madre del próximo Gassol- recibe el artículo en su domicilio.
Además, para que no haya problemas de ningún tipo, SECOND HAND SCHOOL gestionan el pago entre el comprador y el vendedor. Por cierto, el comprador tiene 48 horas, una vez ha recibido el artículo, para verificar que se ajusta a la descripción dada por el vendedor y, de no ser así, puede devolverlo sin cargo alguno. De todas formas y para garantizar que los productos son de calidad solo se pueden vender productos cuyo precio inicial haya sido superior a 30 euros. Y ya que hablamos de números, el vendedor obtiene el 80% del beneficio y la plataforma el 20%.
En las redes sociales de SECOND HAND SCHOOL podemos ir viendo los distintos artículos que se van subiendo a la web. En su INSTAGRAM ya he visto yo algunos disfraces muy interesantes...
Tanto el proceso de venta como el de compra son muy intuitivos. Lo podéis ver en este esquema pero, vamos, que somos todas muy listas y lo podemos hacer con los ojos cerrados.
Como os decía dejaba para el final algo que me había gustado especialmente y es que la web también ofrece la posibilidad de vender vestidos de comunión de segunda mano o, en mi caso, americanas azul marino divinas de la muerte y con solo una puesta. ¿No es genial?
Y por hoy no os cuento más. Ya podemos empezar todas a buscar violines, palas de pádel, faldas del uniforme, disfraces rosas de princesa y, por supuesto, botas de baloncesto. Feliz martes.