Nadie está libre de pasar un duelo así que, ponte al día.

Por Mamá Golondrina Yolanda Fortes @MamaGolondrina

Marta Romo nos explica en Las Mañanas de RNE (escuchar aquí) que todos los días miles de personas se enfrentan a la pérdida de sus seres queridos. A veces tras una larga enfermedad, otras de forma inesperada, como ha sucedido recientemente en los atentados de París. A todos, en diversos momentos de la vida, nos toca afrontar duelos, unos más duros que otros.

Un duelo no es fácil. Siempre es duro. Aunque es la actitud de la persona la que determina que, ese duelo, se lleve mejor o peor. Y a nivel personal, le hice un comentario que mencionó en su intervención en la radio (escuchar aquí) y que me apetece compartir contigo.

Después de haber vivido una dura situación personal, algo me abrió los ojos de golpe y me hizo pensar. Tanto, que aproveché ese sentimiento de reflexión, miedo y angustia para hablar todo lo que tenía que hablar con mis padres y hermano (mi familia más cercana porque con mi marido hablo todos los días).

Con ello tengo, por muy duro que suene, la tranquilidad de que si mañana nos pasase algo a alguno, sentiría una paz infinita porque está todo dicho. Y creo que ellos, sienten lo mismo respecto a mi.

Reconozco que cuesta horrores tomar ese paso pero juro que es un ejercicio maravilloso, que nos permite avanzar en nuestra vida con unos sentimientos totalmente sanos, lejos de rencores. Y que por muy duro que me haya resultado, prefiero eso que ir luego a llorarles a la tumba o llorar de por vida el no haberlo dicho todo (Te quiero, Perdona, Pensé, Me gustaría, Empezamos…). Es duro, lo sé, y no todo el mundo lo entiende pero  repito que, ha nivel personal ha sido una actitud muy positiva para mi y para liberarme emocionalmente de ataduras limitantes.