Comienza un nuevo año y con él continúo con la ilusión de aprender nuevos platos y postres caseros. Este es un postre ligero y delicioso para los amantes de las naranjas naturales, las que se cogen directamente del árbol sin que se tiren dos meses en una cámara. Y en Naranjas delicia saben muy bien de lo que hablo. Hace ya un año que soy cliente de esta pequeña empresa del valle del Júcar y me sirven mis naranjas en menos de 24h. del árbol a la mesa, eso no tiene precio. Unas naranjas de gran calidad y exquisito sabor…a naranja, como debe de ser, y sin tratar.
Os traigo varias formas de presentación que he ido variando según me las he ido comiendo.
Esta con la salsa a un lado.
Esta la presenté boca arriba pero hay que presentarla a la hora de comerla pues se va abriendo, pero queda también muy cuca.
*Con estas cantidades han salido cinco raciones individuales para que os hagáis una idea.
INGREDIENTES
-dos granadas hermosas
-medio litro de zumo de naranja recién exprimido
-6 hojas de gelatina
-tres cucharadas soperas de azúcar
PREPARACIÓN
Lo primero desgranamos las granadas y reservamos. Para ello lo explico bien aquí. En un cuenco ponemos agua fría y sumergimos las hojas de gelatina para que se hidraten, esto hará que le de consistencia al postre.
Mientras se hidratan preparamos el zumo de naranja con su pulpa.
Ahora, en un cazo ponemos el zumo de naranja con el azúcar y lo llevamos al fuego. Cuando esté caliente escurrimos bien entre las manos las hojas de gelatina y las echamos al cazo.
Damos unas vueltas con una cuchara hasta que estén bien disuelta pero sin dejar que hierva. Vertemos en unos cuencos individuales los cuales habremos untado con aceite para que no se pegue la gelatina y añadimos dos cucharadas soperas de granada en cada uno.
A medida que vaya enfriando moveremos un poco con el fin de que no se queden todos los granos de granada arriba del todo, pues flotan.
Ahora preparamos una salsa ligera de granada. Ponemos en una sartén mediana los granos de una granada y tres cucharadas de agua. Dejamos cocer cinco minutos y añadimos una cucharada y media sopera de azúcar. Movemos de vez en cuando durante diez minutos.
Ahora tendremos que pasar la salsa bien por el chino o el pasapuré para que los pipos que tiene la granada no pase a la salsa y quede fina. No sale mucha pero la suficiente pues solo se sirve una cucharadita de postre.
Meter las gelatinas a la nevera hasta la hora de servir. Desmoldar pasando una lengua de silicona toda alrededor para que se suelte y acompañar con la salsa de granada.
Os deseo a todos un muy feliz año nuevo.