Una de las cosas que más nos gustaron de París fueron los veleros del Jardin du Luxembourg. Después de pasear y ver estatuas o de relajarte junto a la fuente de Médici, busca el "Grand Bassin". Verás un estanque y un puesto lleno de barcos de juguete. Puedes alquilar uno durante media hora, cuesta unos tres euros. Nosotros escogimos el barco pirata y nos dieron el barco (que, aunque no lo parezca, pesa una tonelada) y un palo para guiarlo por el agua. Me encantó esta actividad parisina tan retro. No es una turistada, tiene encanto, así que os la recomiendo.