Esto no tiene fin. No es que se pasen por el arco del triunfo la limitadísima ley de la Memoria Histórica, no, es que hacen apología del terrorismo y ahí siguen con la connivencia de un gobierno que les avala.
Y que no digan que no. Tienen una facilidad pasmosa –me refiero al gobierno— y se ponen de perfil cuando se trata de actos que homenajean a franquistas, fascistas, nazis y gente de mal vivir.
¿Cómo es posible que ayer, 23 de agosto, se pudiera celebrar un acto de homenaje autorizado a la Legión Cóndor? ¿Acaso sabe este gobierno indocumentado quién fue y qué hizo la Legión Cóndor? Me temo que sí y probablemente por ello les dejan actuar.
Si hay un acto emblemático de la crueldad de un guerra civil injusta es el bombardeo del pueblo de Gernika. Y fue la Legíon Cóndor quien cometió esa tropelía criminal, asesinando a cientos de civiles.
Bueno, pues no contentos con haber puesto patas arriba a este país al dar un golpe de Estado contra el orden constitucional y de habernos tenido bajo el yugo franquista casi cuarenta años, resulta que los franquistas encima lo celebran y con la bendición de los poderes públicos.
La Guardia Civil reconoce que autorizó el acto. El subdelegado del gobierno en Palencia calla como una rata y el ministerio del Interior ni sabe ni contesta. Esta es la forma que tienen de guardar respeto a las leyes. No sólo es que no han reconocido a las víctimas franquistas, sino que además las ultrajan dejando que se efectúen estos actos que van contra la ley de la Memoria Histórica, que se pueden considerar enaltecimiento del terrorismo y que debería atentar contra la dignidad de todos los demócratas.
¿Alguien puede imaginar un acto así en Alemania, o en Italia? Sería un delito tipificado y castigado. Y estamos hablando de un homenaje a alemanes nazis. Asesinos alemanes nazis que se unieron a la epopeya franquista con su ayuda genocida.
No hay mucho más que decir. Y que no vengan con que es una anécdota y que hay que mirar hacia adelante. Son muchos los actos y declaraciones que los peperos hacen a favor del régimen franquista, por cierto al que todavía no han condenado.
Gernika es un símbolo del horror y de la destrucción del franquismo y el nazismo, del asesinato y de la cobardía. No puede haber nadie con sensibilidad que pretenda homenajear a esos asesinos o que colabore en su reconocimiento. Quien del PP ha permitido que se haya celebrado este acto debería haber echado una ojeada al Gernika de Picasso antes de autorizar esta canallada, aunque para ver la crueldad, hay que tener sensibilidad.
Salud y República