Que los nazis no eran muy amigos del cómic, el jazz u otras manifestaciones artísticas a través de las que la influencia de los Estados Unidos se infiltraba en las clases populares, parece que tiene su lógica.
Edgar Pierre Jacobs (1904-87) continuó las andanzas de Flash Gordon para una Bélgica ocupada a la que no llegaba el material yanqui… hasta que los nazis le prohibieron dibujarla. Y en 1943 la revista belga Spirou cerró sus puertas tras negarse a admitir a un administrador colocado por el ocupante.
Como corolario, las viñetas norteamericanas hicieron todo lo posible por combatir al enemigo. En este sentido, no debemos olvidar que entre los pioneros del comic-book hay un muy elevado porcentaje de artistas judíos [1].
Dado que los superhéroes de la Edad de Oro fueron utilizados como herramienta propagandística en la Segunda Guerra Mundial, y tratándose de un género fantástico, el ambiente era propicio para que nazis y dinosaurios compartieran viñetas:
Fletcher Hanks [2] (1889-1976), ideó a la pionera superheroína Fantomah (1940, Jungle Comics #2), que en Jungle Comics #12 (1940) invoca a un ejército de dinosaurios (o algo parecido) [3] para combatir a los nazis en Brasil.
Pero lo habitual es encontrar a los dinosaurios –considerados, en general, como una amenaza- del lado de las Fuerzas del Eje y, así, Boy King (1943, Biro y Bob Wood/ Alan Mandel entintado por Barry), combate a nazis y dinosaurios.
Maurice Scott publicó la aventura de Shock Gibson -a.k.a. The human dynamo- “The Monsters from Mercury” (1942, Speed Comics #17), en la que se enfrenta a un monstruo de vago aspecto dinosauriano (casi tan feo como los de Fantomah) que luce una esvástica… y que resulta ser un ingenio mecánico manejado desde el interior por unos traviesos mercurianos.
Major Bummer (1997, John Arcudi /Doug Mahnke) se enfrentará a Tyrannosaurus Reich, que viste uniforme nazi y sólo habla alemán.
Hitler clona dinosaurios en Fearless Dawn (The bomb swimsuit #1, 2007), de Steve Mannion (1965) para Asylum Press, mientras que Dan Abnett enfrentó a The Authority, spin-off de Stormwatch (1993, Jim Lee) con nazis y dinosaurios (The Authority #9, 2009).
En la Era Le Pen –y tantos otros monstruos europeos (y alguno patrio)-, Francia parece encabezar esta nueva ola de cómics con nazis y dinosaurios:
El webcómic Dino-D Day: Operation Genesis (2015, Tommy Lee Edwards) adaptó el videojuego homónimo (2011), en el que podemos elegir el bando aliado o el de las Fuerzas del Eje, que cuenta con dinosaurios de apoyo.
Por lo que se refiere a otros medios, debemos destacar el filme filandés-germano-australiano Iron sky (2012, Timo Vuorensola), del que ya existe una secuela, “The coming Race” (2019).
En el episodio nº 2 de la comedia televisiva Danger 5 (2012), "Lizard - Soldiers from the Third reich", descubrimos que el Dr. Josef Mengele ha creado un mundo perdido con dinosaurios en la Antártida, desde donde ahora les envía a machacar a los aliados.
En cuanto a la literatura más reciente, Jack Scatter y Brian Martinez escribieron la delirante Nazi Dinosaur High School Chaos: The secret history of the Illuminati y Brent Reilly Nazis vs Dinos (2018).
-----
[1] Jacob Kurtzberg “Jack Kirby”, Hymie “Joe” Simon, Stanley Martin Lieber “Stan Lee”, Jerry Siegel, Joe Shuster, Max Finkelstein “Carl Burgos”, Milton “Bill” Finger, Gene Cohen “Colan”, Eli Katz “Gil Kane”, Robert Kahn “Bob Kane”, Mort Weisinger, Joe Kubert o Will Eisner. También eran judíos editores de cómics como Harry Donenfeld (DC), Martin Goodman (Marvel) o Max Ginsburg o Ginzberg “Gaines” (EC).
[2] Usó muchos pseudónimos: “Bob Jordan”, “Hank Christy”, “C.C. Starr”, “Carlson Merrick”, “Lance Ferguson”, “Charles Netcher” o “Barclay Flagg”...
[3] En el cómic los llama “Bestias desconocidas para el hombre blanco”, pero Sébastien Andrivet o “The Grand Comics Database” aseguran que son dinosaurios.