El músico que mejor ha sabido envejecer sin duda, y con una carrera a sus espaldas que hace palidecer cualquier otra, Neil Young, el canadiense más célebre, cumple hoy 70 años. De hecho si se repasa su producción discográfica sólo en este siglo, asusta pensar que ha editado 14 discos en 15 años, a casi uno por año, ya sea sólo, con Crazy Horse, con orquesta, metido en una cabina de los años 20, rockeando, más acústico, o de mil formas. Encima y por si fuera poco, es un artista muy influyente, de hecho sus tentáculos llegan a gente de lo más variopinta, desde gente del country, como no, gente del folk, hasta a músicos modernos como Jake Shears, líder de Scissor Sisters, un ramillete inabarcable, que incluye también a Pearl Jam que le denomina el Padre del grunge, con los que incluso hizo un disco en los 90 y han tocados juntos en vivo.Ya desde sus inicios en los años 60 como componente de Buffalo Springfield o unido a Still, Crosby & Nash dejaba claro que era un compositor e intérprete de muchos kilates, cosa que dejó más que clara con discos siguientes como Neil Young, Everybody knows this is nowhere, After the gold rush, Harvest, On the beach, Tonight's the night, Zuma, Comes a time, etc...
Además siempre ha hecho lo que le ha venido en gana, que si quería experimentar con máquinas, que si quiso sacar un disco de rockabilly y lo hizo con tupé y todo, discos protesta, fundó el festival Farm Aid...
De su último y extraordinario trabajo The Monsanto Years, de este 2015, donde se une a Promise of the real, acusa directamente a la empresa que más ha contribuido al fomento de organismos genéticamente modificados (OMG), en pocas palabras Monsanto (multinacional agroquímica) quiere agricultura industrial y Young pequeñas granjas familiares, las de toda la vida de Dios.Por eso su nuevo trabajo es un disco conceptual, que denuncia el poder de ese gigante y su papel en el deterioro constante de las condiciones de vida de los entornos rurales.
Os dejo con el tema Wolf moon.