Algo tiene Nueva York, que no se encuentra en cualquier otro lugar del mundo. Fer dice que es una ciudad con vida propia, y yo estoy de acuerdo. Lo que tienen los lugares en Estados Unidos es eso que pareciera como contagioso. Se puede estar de acuerdo o no con su tipo de politica, o su estilo de vida, pero en este caso lo que importa es esa sensación al visitar este lugar.
La gente está a las corridas, todo es rápido, todo es información. Pero a la vez todo es confort, todo esta organizado, la gente parece estar alegre, todo es a lo grande, desde el refill de las bebidas hasta las casas, los espacios públicos, todo!
Toda esa energía hace que el recorrer New York sea una experiencia muy distinta a estar en otros lugares.
Nueva york a pesar de los inmensos rascacielos no se siente una ciudad fria y si bien no tiene tanta historia como otros lugares, es una ciudad con mucha personalidad, por eso se siente que tiene vida!
Hicimos un resumen de como podria ser un recorrido con lo mas típico de la ciudad, o al menos el que nosotros decidimos hacer. (Metodología de planeamiento: todas las mañanas en algun lugar con internet y el google maps del ipad, fer me decía: hoy que hacemos?? Jaja).
Durante la semana en new york nos sorprendimos a nosotros mismos de la cantidad de kilometros que somos capaces de recorrer caminando.
Nos parece que no hay nada mejor para recorrer una ciudad que caminarla.
Podríamos decir que recorrimos la ciudad en 5 días. Nos alcanzo? No! Tendríamos que quedarnos un mes para poder recorrer todo lo que nos hubiera gustado. Pero podemos decir que pudimos conocer todo lo que un turista debe conocer de la ciudad.
Algo importante: el no poder ir de compras para no cargar mucho equipaje nos ahorra mucho tiempo que en otro tipo de vacaciones uno pierde metido en un shopping en lugar de conocer la ciudad.
DIA 1: Llegamos al aeropuerto “La guardia” y ahí nos estaba esperando Bill Darger, amigo de la familia. Como ven, hay amigos en todas partes! Estamos poniendo a prueba la teoría de los 5 grados de separación y hasta ahora se está cumpliendo!De ahí nos llevo directamente a Grand Central Terminal, la estación de subte y trenes más hermosa y grande que vimos en nuestra vida, la cúpula con la pintura de las constelaciones, las arañas, los túneles, todo nos encanto.
Por suerte le agarramos rápido el ritmo al transporte en New York a pesar de que es bastante movido. Pero como en todo país de primer mundo nos encantó lo organizado que esta todo y la puntualidad. Eso si, un poco caro comparado con Buenos Aires: 2,5 dólares el viaje en subte y 7-10 dólares el tren. Pero un servicio de calidad, en el tren siempre se viaja sentado, los asientos son muy cómodos, hay baño y calefacción.
De Grand Central nos tomamos un subte hasta el Puente de Brooklyn y lo cruzamos a pie ida y vuelta. Es un recorrido con una vista imponente, y Manhattan se ve increíble desde el otro lado del puente. Los colores, los edificios, muy lindo.
Ni hablar de la zona de Brooklyn, las casas son de película, con las escaleritas en la entrada, casi no pasan autos, es muy silencioso, tranquilo y pintoresco.
Hay todo tipo de negocios, ventas de libros usados, y ferias de ropa usadas, además de lugares de comida.
En el puente muchas parejas ponen candados para sellar su amor (nosotros no dejamos el nuestro, nuestras mochilas necesitas seguridad jeje).
Hicimos un picnic con sándwiches de atún en DUMBO, un parque que se encuentra entre los puentes de Brooklyn y de Manhattan. Este lugar surge de la transformación de lugares semiabandonados como fábricas y galpones en lofts de lujo, galerías de arte y teatro.
Zona cero. Un imponente recordatorio del atentado a las torres gemelas, en el lugar donde estaban las torres se hicieron dos grandes fuentes de agua con los nombres de las víctimas en los bordes.
Nos encontramos con Bill para cenar en un lugar riquísimo que se llama Henry´s en 103 y Broadway (comimos bárbaro) y después nos llevó al MET (Metropolitan Museum). Es uno de los museos más importantes del mundo y es inútil tratar de resumir todo lo que se ve en el, asi que solo vamos a hacer referencia a las obras que más nos gustaron que fueron las pinturas de Van Gogh y la zona de Egipto, que recomendamos visitarla de noche y de día, la iluminación es perfecta.
En la sala de Egipto se encuentra el templo de Dendur, un regalo que le hicieron los egipcios a los estadounidenses por su colaboración para rescatar templos nubios inundados.
DIA 2: Recorrimos un poco el Central Park, un parque tan grande por el que se puede pasear todo el día y encontrar miles de lugares hermosos para parar y tomar unos ricos mates. Después del pulmón de la ciudad fuimos hasta el Time Square.
Es una locura de información, imágenes, publicidades con movimiento, sonidos, música, luces, colores… más de lo que un cerebro puede resistir, y es peor cuando queres mirar TODO a la vez!
Nos sentamos en las escaleras rojas a merendar, tomar unos mates y mirar un poco desde afuera la vorágine de la ciudad.
En cuanto a los locales de ropa podría hacer un blog aparte contando todo lo que se ve, algunos locales son taaan grandes que por más que Noe ame la ropa ya se volvían insoportables de recorrer. Pero siiiii, podes encontrar DE TODO y cosas increíbles.
Fuimos a la Biblioteca Nacional. Es hermosísima! Uno de esos lugares que uno no se sabe a dónde mirar porque todos los detalles valen la pena.
Rockefeller Center, es otro de los lugares míticos de Nueva York. Esta lleno de negocios de lujo, una gran pista de patinaje sobre hielo con su restaurante y un poco mas arriba la estatua de Atlas. De noche a pesar de no estar en vísperas navideñas siguen iluminando los árboles con lucecitas.
La iglesia de San Patricio estaba cerrada por remodelación, asi que por fuera no se veía muy bien, pero por dentro pudimos conocerla un poco.
DIA 3: Este fue uno de los más moviditos caminamos mas de 15 kilometros. Comenzamos el día caminando por Park Avenue, una avenida repleta de flores, llena de tulipanes. Nos contaron que cuando fue el atentado del 11 de Septiembre Holanda envió un millón de bulbos y es por eso que hay tantos tulipanes por todos lados.
Fuimos al Soho, al Little Italy y a China Town. Muy recomendable comer en esta zona, hay porciones de pizza por un dólar, y la comida china es más económica también.
Pasamos por el edificio Flatiron. Se encuentra en el parque de la plaza Madison. Es uno de los mejores ejemplos de cómo aprovechar una calle triangular. Su nombre es por su forma de plancha. Cuando se inauguró en el 1900 era el edificio más grande de Nueva York.
Fuimos al Arco del Triunfo de la plaza llena de estudiantes universitarios, es un buen lugar para parar a descansar un rato.
Visitamos algunas iglesias hermosas que no recordamos el nombre y el New York City Hall.
A la zona de Wall Street la encontramos un poco más chica de lo que nos imaginábamos. Obviamente nos sacamos una foto con la escultura del toro que además de simbolizar la fuerza y el optimismo en las finanzas representa al toro embistiendo hacia arriba como la bolsa cuando crece…. Me parece que esa escultura queda media obsoleta después de la crisis….Ahora parecería que esta más flaquito y agachando la cabeza….
Tomamos el Ferry a Staten Island que pasa por la estatua de la libertad, que es gratis y sale cada 15 minutos. Es increíble lo bien que funciona para la cantidad de gente que viaja en el todos los días. Para los que quieren subir a la estatua también hay barcos que te llevan hasta ahí pero obviamente pagando un tour.
La vista de Manhattan desde el barco es genial, y la estatua se puede ver desde bastante cerca. Nos dijeron que en Staten Island no había mucho para recorrer así que solo estuvimos 15 minutos que es lo que tarda en salir el siguiente ferry a Manhattan.
Hay un acuario nuevo en la estación del Ferry que se lo puede mirar mientras se espera, o jugar un rato como Fer.
De la terminal del ferry nos tomamos un subte y bajamos en el Central Park, recorrimos un poco, tomamos unos mates y visitamos el monumento a John Lenon, el Strawberry fields, en frente el edificio Dakota donde lo mataron.
Esa noche cenamos un patito… jajaja… mentira!!
Estuvimos de nuevo en el Time Square, pero esta vez de noche, vale la pena verlo así, esta zona nunca duerme y siempre hay algo interesante para ver.
Lo que más nos gustó de New York es que a medida q vas recorriendo la ciudad te vas sorprendiendo y encontrando con lugares que no esperabas, que sabias que estaban ahí pero no recordabas.
Dia 4: Fuimos al MOMA, otro museo que es increíble. Fue muy emocionante estar en frente de obras tan conocidas como Las Señoritas de Avignon de Picasso, Las sopas Campbell´s de Andy Warhol, obras de Henri Matisse, Van Gogh entre otras.
Puede llevar todo un día recorrerlo, asi que algunas zonas las hicimos más rápido. Lo mejor para recorrerlo fue usar unos auriculares que te dan gratis con las explicaciones de curadores de arte sobre las obras. Eso fue fundamental para aprovechar el recorrido al máximo.
Este día pasamos por Radio City, la escultura de LOVE y la juguetería FAO, donde pudimos tocar el piano gigante con los pies. Al principio estaban tocando solo los niños hasta que Noe se acercó a la encargada del salón le pidió permiso para tocar también! Nos sentimos en la película “Quisiera ser grande” con Tom Hanks.
Recorrimos muchos negocios de la 5ta avenida hasta que se hizo de noche. La mayoría de los locales están cerrados pero las luces de las vidrieras hacen que todo se vea todavía más lindo que de día.
Tomamos algo calentito en el subsuelo del Gran Central y tomamos el tren de regreso a Scarsdale donde queda la casa de Bill y su familia que nos alojaron durante nuestra estadía en NY-
Dia 5: Fue un día duro, no paro de llover ni por un momento, pero decidimos salir a recorrer igual. En el subte escuchamos una banda espectacular de música Country “Evony Hillbillies” muy alegre y divertida que nos sugirieron los Dargers.
Visitamos el museo Guggenheim, de arte moderno. El recorrido es muy interesante ya desde el inicio, su forma espiralada hace que uno pueda recorrer todos los pisos en forma continua, la arquitectura de este museo nos pareció una obra de arte en sí misma. Este museo tiene obras que pertenecían a familias neoyorquinas, entre ellas estaba la familia Guggenheim, y decidieron poner sus colecciones privadas en un espacio público.
Entre las obras que más nos gustaron de la exposición estable fueron “En el Salón” de Toulouse-Lautrec (es hermosísima), pinturas de los inicios de Picasso, Miró, Kandisky y las bailarinas de Degas.
De la exposición temporaria tuvimos la suerte de encontrarnos con la vanguardia futurista. Es una de las vanguardias favoritas de Noe, no porque esté de acuerdo con su manifiesto, si no por la fuerza que tiene es su identidad y la manera en que la representa.
Recorrimos un poco más del Central Park con la lluvia, tiene su encanto con mal clima también. Nos encontramos Paraguas en la calle y usamos las bolsas para paraguas que te dan en los museos jaja… estabamos muy equipados para la lluvia!
Dia 6: Antes de salir para el Aeropuerto Sacamos algunas fotos de Scarsdale, el barrio donde estuvimos hospedados en la casa de la familia Darger.
Es un barrio en las Afueras de Manhattan muy tranquilo, con casas bajas y mucha vegetación. Fue una hermosa experiencia poder conocer mas a esta familia, nos sentimos muy bien con ellos y nos divertimos mucho, y como dice Jennifer, nos dieron mucho mucho amor.
Y como dijo Frank Sinatra, New York New York… I Want To Be A Part Of It!